Los ecos de la dimisión del ya exdiputado autonómico del PP Javier Escribano, acusado de cohecho y tráfico de influencias en el marco de la Operación Arena, que se suma a la de Pablo Cobián, imputado en la Operación Campeón, han valido a la oposición para cargar contra la mayoría popular en la Cámara y contra la propia Xunta, que mantiene a 13 altos cargos imputados en varios casos, según denunciaron. Para repeler las críticas, el presidente Alberto Núñez Feijóo ha circunscrito su Gobierno a sus "10 conselleiros", a partir de lo cual ha afirmado que "no hay ningún imputado" en su ejecutivo.

Esta sentencia ha causado enorme revuelo en la sesión de control, lo que ha provocado la intervención de la presidenta del Legislativo, Pilar Rojo, en numerosas ocasiones y la llamada al orden a dos diputados, el socialista Francisco Cerviño y el nacionalista Bieito Lobeira, que se quedó a un aviso de ser expulsado del hemiciclo.

Todo comenzó cuando el portavoz del BNG, Carlos Aymerich, inició su pregunta al presidente recordando "las miserias" del PP, con parlamentarios que actúan como "comisionistas" después de recibir "coches de alta cilindrada", en referencia al Porsche de un empresario que acabó en manos del exdiputado Escribano.

En su turno de réplica, Feijóo ha distinguido entre "diputados que asumen su responsabilidad", como Escribano y Cobián, y "miembros de un gobierno", en alusión al nacionalista Fernando Blanco, vinculado también a la Operación Campeón en la etapa en la que ejerció como conselleiro de Economía e Industria con el bipartito.

"Debería pedir disculpas", ha recomendado a Aymerich, y ha rechazado "lecciones de ética y moralidad" del BNG, ya que un miembro del Ejecutivo al que apoyó está "acusado" de haber cobrado comisiones a través de sus adjudicaciones. "Aún no sabemos exactamente qué ocurrió, pero, de momento, eso es lo que sabemos", ha señalado, para destacar que "de momento, este gobierno aún no está encausado".

En su siguiente intervención, el nacionalista incidió en la cuestión para criticar la actitud del presidente provincial del PP coruñés y alcalde de la ciudad herculina, Carlos Negreira, quien Aymerich aseguró que dio aviso a Escribano de que "anduviera con ojo" porque estaba siendo investigado. "¿Usted cuándo se enteró de la Operación Arena?", ha inquirido, y ha preguntado también "qué sucede en la Consellería de Industria", dadas las alusiones a departamentos suyos en piezas del sumario que han trascendido.

"ningún trato de favor"

"¿A qué conselleiro de Industria se refiere?", ha replicado el mandatario autonómico, incidiendo en "su colega" que "tuvo que dimitir" por aparecer en un sumario por "cobro de comisiones". En cambio, ha destacado, el actual Gobierno gallego "sancionó" a la empresa del principal imputado en la Operación Arena a través de un expediente y no "le abrió de par en par" las puertas de la Xunta.

"Si tenemos errores, los asumimos, pero en este Gobierno no hay nadie implicado en ningún caso", ha replicado Feijóo, mientras desde las bancadas de la oposición le recordaban los 13 imputados de su Ejecutivo y le acusaban de "mentir" en mitad de un gran alboroto y de varias interrupciones en su intervención, por lo que Pilar Rojo pidió "tranquilidad, educación y respeto".

Al término de esta pregunta, el portavoz del Bloque pidió de nuevo la palabra para denunciar que el presidente de la Xunta "miente", al tiempo que se interesó por conocer la situación procesal del titular de Medio Ambiente, Agustín Hernández, pese a que la presidenta no le concedió la palabra y reprochó a sus señorías el "lamentable espectáculo" que estaba ofreciendo la Cámara. "La primera obligación que tenemos los diputados es respetar a todos los que hablan", ha advertido.

"decir la verdad"

Sobre esta frase comenzó su intervención el líder socialista, Pachi Vázquez, quien se permitió hacer "una pequeña corrección" a la jefa de la Cámara. "La primera obligación de los diputados es decir la verdad y el presidente acaba de mentir, porque en su gobierno hay 13 imputados", ha incidido, para retar a Feijóo a desmentir sus palabras.

"Tengo 10 miembros en el Gobierno, es imposible que haya 13 imputados", ha expuesto el mandatario gallego, para reiterar que "no hay ningún imputado" entre los cargos directamente nombrados por él y cuestionarse "cómo acabarán" tanto el bipartito como el actual Gobierno de España.

En su siguiente turno de palabra, Vázquez se centró en el director del Instituto Galego de Promoción Económica, Joaquín Varela de Limia, imputado en la Operación Campeón, para ironizar con el "descubrimiento" de que éste "no es miembro de la Xunta". "Este director ya no está en el Igape, desde el primer día, y no fue nombrado por el Gobierno", ha rebatido Feijóo, porque según explicaron a Europa Press fuentes próximas al presidente, Varela fue designado por el conselleiro de Economía.

"Es capaz de renegar de cualquier cosa, hasta renegó de Fraga cuando adjudicó la Cidade da Cultura siendo usted vicepresidente", ha censurado Pachi Vázquez a la vista de su respuesta, pero el dirigente gallego ha mostrado su "respeto" al expresidente gallego y ha comentado al socialista que si él hubiese respetado más a Emilio Pérez Touriño "estaría en una situación ética y política diferente".

"Pero yo no comparto la política de gasolinera, ni como lugar de reunión, ni para echar gasolina a la política", ha sentenciado Feijóo en alusión a la reunión mantenida por el ministro de Fomento, José Blanco, en una estación de servicio de Guitiriz con el empresario Jorge Dorribo, principal acusado en la Operación Campeón.