El nuevo director del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA), José Vicente Lacasa, ha anunciado la intención de reestructurar este centro "para adaptarlo a las nuevas líneas de trabajo", aunque ha asegurado que se hará "con diálogo" con el personal del CITA y los empresarios.

Lacasa ha expuesto en rueda de prensa las líneas que se quieren impulsar, acompañado de los consejeros del Gobierno de Aragón de Innovación y Nuevas Tecnologías, Modesto Lobón, y de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Federico García López.

Entre las áreas que se quieren incentivar, ha mencionado la porcina, tanto en lo que se refiere a sanidad animal como a la solución de problemas medioambientales, como los ocasionados por los purines; y el área de la industria agroalimentaria, para fijar qué tipo de industrias "serían más interesantes y dónde las podríamos ubicar" en el territorio.

Asimismo, el área de biomedicina, especialmente lo referente a la detección de componentes con influencia positiva en la salud humana y mejora de los alimentos, y el área de biotecnológica, con mejoras en animales y plantas de interés para Aragón.

El director de CITA ha señalado que también pretenden "potenciar y ampliar" el actual banco de germoplasma; el biocombustible y la biomasa a través de técnicas y procesos tecnológicos y energéticos, teniendo en cuenta "el análisis económico y las perspectivas de mercado" con la finalidad de establecer un sistema "que no dependiera de subvenciones, sino que los procesos fueran lo más baratos posibles para tener la energía más barata".

Además, ha indicado que esta última línea puede suponer una "alternativa de cultivos" para el futuro de la agricultura aragonesa. Igualmente, ha mencionado la necesidad de potenciar áreas sociales y medioambientales, como las relacionadas con la masa forestal y los ecosistemas.

En contacto con la sociedad

Lacasa ha asegurado que "vamos a estar muy en contacto con las asociaciones" y entidades vinculadas con el CITA "para que nos transmita sus demandas y veamos qué propuestas hacer", si bien ha recordado que es el Consejo Rector del organismo quien debe marcar las directrices para las líneas de investigación.

También se ha referido al personal del centro y ha subrayado que son "conocidos y reconocidos" en el ámbito nacional, europeo "y mundial", si bien este centro "más desconocido a nivel regional" y se ha fijado el objetivo de que haya más difusión del centro en Aragón porque "hay pocos centros de este tipo que sean así de multidisciplinares y que tengan prácticamente todos los campos cubiertos".

Por otra parte, ha remarcado que aunque va a haber un recorte presupuestario, este no va a afectar al sueldo del personal, pero sí "habrá que sacrificarse" en otros ámbitos, para indicar que el centro recibe recursos externos que espera se mantengan.

Al respecto, el consejero de Innovación y Nuevas Tecnologías, Modesto Lobón, ha señalado que los gastos de personal no se van a recortar en el conjunto de la Administración autonómica en 2012, para aclarar que la "reorientación" que se le quiere dar al CITA se enmarca dentro del objetivo de lograr una mayor "eficacia investigadora".

En este sentido, ha afirmado que el "potencial investigador" del CITA es un "punto fuerte" y por eso quieren sacarle el "máximo rendimiento". Para eso, uno de sus objetivos es incrementar el número de patentes del centro, actualmente bajo, que es "el parámetro europeo de eficacia económica de la investigación" y una "manera de medir el progreso del CITA".

Lobón ha recalcado que el fomento de la agroindustria es "una columna vertebral" para el actual Gobierno de Aragón, una "prioridad", que también se incluye dentro del pacto de gobernabilidad suscrito entre el Partido Popular y el Partido Aragonés para esta legislatura.

El objetivo final es que la investigación sirva para "beneficiar" con aplicaciones prácticas "a la economía aragonesa" y ha manifestado su intención de potenciar el Parque Tecnológico de Aula Dei, donde se incluye el CITA, para lo que se quiere mejorar la conexión entre investigadores y empresas, primero a través de las nuevas tecnologías y después "físicamente".

Transferencia del conocimiento

El director de CITA ha anunciado que dentro de unos días se va a constituir una Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI), cuya finalidad será "generar transferencia al sector agroalimentario" y habrá un responsable de esa transferencia.

Asimismo, el mes que viene se presentará el repositorio del CITA, que "tiene pocos centros" y permitirá acceder al catálogo de la biblioteca de este centro a todos los usuarios en formato 'PDF'.

Por su parte, el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Federico García López, ha indicado que el Gobierno va potenciar la innovación y la tecnología en el sector agroalimentario aragonés, a través del impulso de la multidisciplinariedad y ha indicado que el CITA es el origen de ese "soporte tecnológico y de la innovación".

Así, ha mostrado su interés en que "toda la innovación que se gestiona en este centro pueda llegar al usuario" y, a la vez, "las necesidades de los usuarios, del mercado o de las nuevas exigencias de gestión de la producción puedan trasladarse al CITA".

El cita

El CITA posee 256 trabajadores, que se reparten entre 69 investigadores y 19 investigadores en formación; 18 miembros del personal técnico de investigación; 46 personal de laboratorio; 51 personal de campo y 53 personal de administración y servicios.

El centro posee 67 subvenciones de investigación competitivas de organismos públicos y 33 investigaciones y transferencias a través de contratos y colabora con diferentes entidades, como la Universidad de Zaragoza, el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIF) y el Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón.

El CITA cuenta con tres fincas experimentales, una ubicada junto al centro, otra en Zuera (Zaragoza) y otra en Bescós de la Garcipollera (Huesca), cerca de Jaca.