La Asociación Española de la Banca(AEB) ha destacado en un comunicado que, aunque las exigencias de capital a las principales entidades españolas “son arbitrariamente altas”, pueden lograrlo por sus “propios medios y en los plazos establecidos”.

Esta recapitalización de la banca es uno de los acuerdos que se alcanzó en la cumbre del miércoles de los países de la zona euro . Esta medida marca que las principales entidades financieras europeas, llamadas sistémicas, deben tener un 9% del total de su capital en sus reservas antes del 30 de junio de 2012.

Esto se traduce para las cinco grandes entidades financieras españolas en que deben recapitalizarse con 26.161 millones de euros para cumplir este requerimiento. Esta cantidad supone cerca de un 25% del total de euros exigidos para toda Europa y solo es superada por la exigencia de 30.000 millones de euros a la banca griega.

Esta elevada exigencia es, al parecer de la AEB, “arbitraria”, se aparta de la norma establecida y “resta credibilidad” a las pruebas de estrés a las entidades financieras realizadas el pasado verano.

En su opinión, esto "mina la confianza" en esos países y "debilita la estabilidad financiera tanto a nivel nacional como de la zona euro en su conjunto". Del total de entidades europeas las cinco entidades españolas que por su peso específico dentro de Europa deben provisionar son el Santander, el BBVA, el Popular, Bankia y La Caixa.

El presidente de BBVA, Francisco González, ha criticado que no se debía haber abordado la recapitalización del sistema financiero europeo "de esa forma" ya que, a su juicio, ha quedado "pendiente" tratar la calidad de los activos.

Por su parte, el consejero delegado del Grupo Santander, que debe captar más de la mitad del capital exigido, ha alabado las medidas aprobadas el miércoles. Al parecer de Alfredo Sáenz, “deberían mejorar la confianza en la banca española” y liberar las restricciones que tenían las entidades españolas para encontrar financiación en el mercado.

Quien siquiera ve necesaria está recapitalización es el director de Análisis de Bankinter, Ramón Forcada, que ha explicado que en España “no hay prácticamente deuda griega”, solo “una exposición cercana a los 800 millones de euros”.