El presidente de Empresa Familiar de Castilla y León (EFCyL), Ginés Clemente, ha asegurado que el consenso se debería extender del círculo político al social para abordar una serie de medidas que permitan salir de la actual situación de crisis, fijar un calendario y "cumplirlo a rajatabla".

Clemente ha asegurado que el nuevo presidente del Gobierno tendrá muchas cosas que hacer en "poco tiempo", serán, según sus palabras, tareas "difíciles" que es posible que no se entiendan y que "quemen su futuro político", pero cree que si no las hace "quemará el futuro de España".

Por otra parte, Ginés Clemente ha expresado el compromiso de las empresas familiares y aseguró que quieren crecer, crear puestos de trabajo, "ser parte de la solución" y recordó que están "acostumbrados" a los "rozamientos".

Sin embargo, ha asegurado que "hoy más que nunca" hace falta que les ayuden, implicación, y concretó que se debe "retomar" la financiación. "No sé cómo", dijo Clemente, quien añadió que es "clave" para el crecimiento.

A ello, ha añadido la necesidad de una legislación laboral "moderna", orientada a la creación de empleo y a las empresas competitivas.

Así lo ha puesto de manifiesto Clemente durante el acto de inauguración del XIV Congreso Nacional del Instituto de Economía Familiar que se celebra desde hoy en la capital vallisoletana y que ha sido inaugurado por los Príncipes de Asturias.

Por su parte, el presidente de PwC incidió en el origen "directo o indirecto" de la crisis en el sistema educativo y destacó la correlación entre la formación y la competitividad, al tiempo que abogó por "otra forma de trabajar" con un nuevo modelo productivo que prime la innovación o la internacionalización, por ejemplo.

En la inauguración también intervino el consejero delegado de Banesto, quien ha advertido sobre el "riesgo excesivo de la regulación" del sector financiero que puede emerger en tiempos de crisis, de manera que un "exceso de celo" pueda acabar siendo perjudicial y dificulte el restablecimiento del flujo de crédito.