Una docena de delegados de la CIG han entrado este viernes vestidos de presidiarios en una oficina de Novagalicia Banco en Santiago, para protestar contra la "privatización" de la entidad y pedir una banca pública y para rechazar las indemnizaciones millonarias percibidas por los exdirectivos de la caja.

Varios delegados se han vestido con trajes de presos y entraron en la oficina situada en la Plaza de Galicia —la que funcionaba como central de Caixa Galicia en la ciudad— con pancartas en las que se declaraban "presos de la banca". Además, gritaron consignas como "No falta dinero, sobran ladrones", "Despidos baratos para los ejecutivos y no para los obreros" y "40 millones de indemnización", en alusión a las compensaciones de los exdirectivos de Novacaixagalicia.

El secretario comarcal de la CIG en Santiago, Anxo Noceda, ha explicado que el acto de este viernes se incluye en la campaña del sindicato para protestar por la situación económica y el desempleo, así como dar publicidad a la movilización que han convocado para el próximo domingo, día 23, en Compostela.

Así, ha indicado que el sindicato nacionalista pretende trasladar a la ciudadanía que "sí son posibles medidas distintas" a las que han adoptado los gobiernos central y autonómico. Por ello, ha criticado una "supuesta austeridad que, a la hora de la verdad se ve que no es tal".

"No hay ningún problema en destinar dinero a la subvención de la contratación indefinida, es decir, destinar dinero a la patronal", ha reprochado y ha concluido que el problema no es que no haya recursos económicos, sino "a quién se quieren destinar esos recursos económicos". "Se está apostando por una mayor concentración mayor de la riqueza en cada vez menos manos", ha apuntado.

Respecto a la banca, ha considerado que el proceso de privatización es "reversible" y ha pedido generar entidades públicas que ayuden a crear empleo y dinaminzar la economía, en lugar de aportar dinero "para que compre deuda por interés mayor" al de esos préstamos, lo que ha considerado "un robo a todas luces".

También ha contestado Noceda a la propuesta de la patronal de rebajar a 20 días, con el pago de ocho de ellos por parte del Fogasa, la indemnización para el despido con contrato indefinido. "Vuelve a haber dinero, pero para despedir", ha lamentado.