Bildu ha urgido al Gobierno de Navarra a que "garantice el futuro" de la planta de Sunsundegui en Alsasua, en la que trabajan cerca de 270 trabajadores, y ha demandado que dé viabilidad a la fábrica bien con la entrada de la sociedad pública Sodena, bien con la búsqueda de uno o varios socios industriales.

La alcaldesa de Alsasua, Garazi Urrestarazu (Bildu), ha afirmado en una rueda de prensa en el Parlamento de Navarra que "los 270 empleos directos y los 250 indirectos alrededor de Sundundegui necesitan una respuesta inexcusable y positiva de la Administración".

Urrestarazu ha señalado que "no podemos incrementar la cifra de 1.540 parados en un territorio histórico y crucial en el cual la crisis se está cebando con intensidad, donde el tejido laboral y empresarial se está diluyendo constantemente y con un problema al que el Gobierno mira de soslayo y sin comprometerse".

La alcaldesa de Alsasua, que ha comparecido acompañada de los parlamentarios de Bildu Bikendi Barea y Fernando Ibilcieta, ha afirmado que "el reto ineludible del Ejecutivo navarro es establecer las condiciones apropiadas y necesarias para luchar contra el paro, la destrucción de empleo y la creación de nuevo empleo, y una de las actuaciones esenciales es la resolución no traumática del contencioso de Sunsundegui".

Por su parte, el parlamentario de Bildu Bikendi Barea ha afirmado que "los trabajadores de Sunsundegui no pueden convivir con la incertidumbre y la inseguridad de estos últimos días y merecen que se apoyen sus esfuerzos para que la planta sea un proyecto de futuro consolidado".

Bikendi Barea ha dicho que "el fortalecimiento de Sunsundegui es el fortalecimiento de la Sakana, y por ende el fortalecimiento del tejido productivo de Navarra". "Por ello, exigimos al Gobierno de Navarra y a los partidos que lo sustentan, UPN y PSN, una respuesta de futuro que dé viabilidad a largo plazo, con capital privado o público, para las 500 personas que dependen directamente o indirectamente de Sunsundegui", ha dicho.

Barea ha señalado que "los recortes presupuestarios que ha ejercido el Gobierno de Navarra con el sacrosanto objetivo de tener un déficit del 1,3 por ciento no ayudan absolutamente nada, dejan a la deriva proyectos de política social y dejan una estela de destrucción en el empleo".