El futuro de las 117 Viviendas de Protección Oficial (VPO), ubicadas en el solar del antiguo cuartel de Artillería de la capital altoaragonesa, que la empresa Bruesa paralizó en 2010 a causa de la crisis económica, se decidirá antes del 30 de octubre, ya que este es el plazo máximo de tiempo antes del que el juez debe determinar si acepta el cambio de titularidad de la promoción para que Brial continúe las obras.

Según un acuerdo, Bruesa que inició y paralizó las obras de construcción de estas VPO, traspasaría la titularidad de dicha promoción a Brial, para que los trabajos pudiesen continuar. Una situación que debe decidir el juez.

El traspaso de titularidad implica, además, levantar las cargas que pesan sobre el solar que, en su día, la empresa Bruesa compró al Gobierno de Aragón.

Los afectados por esta situación, en su mayoría gente joven, viven con incertidumbre el futuro de estas viviendas con las que comprometieron formalizando algunos pagos. Durante este proceso, han mantenido encuentros y se han mantenido informados, de forma presencial en las reuniones convocadas o a través de la red social, en otros casos, para intentar encontrar la fórmula para que la construcción continúe y no perder sus viviendas.