El intento de desalojo por parte de la Ertzaintza del local juvenil "Kukutza", en Rekalde (Bilbao) se ha saldado con siete detenidos por desórdenes públicos, mientras que los integrantes de este colectivo han anunciado que no abandonarán el edificio que ocupan en el barrio de Rekalde.

Portavoces de 'Kukutza' y de la Asociación de Vecinos de Rekalde, que han rehusado identificarse, han ofrecido una conferencia de prensa en la plaza de este barrio en la que han denunciado la "violencia policial" ejercida en esta operación.

También han hecho un llamamiento a la ciudadanía para que secunde una manifestación convocada para esta tarde en protesta contra el desalojo de este edificio, cuyo derribo autorizó el Ayuntamiento de Bilbao.

El departamento vasco de Interior ha informado del arresto de siete personas, aunque los jóvenes aumentan el número a 25. El portavoz de la Asociación de Vecinos de Rekalde ha criticado la "violencia policial", así como el "interés especulativo" de los propietarios del edificio, que lo habían dejado abandonado y ahora han decidido construir pisos.

Ante las quejas recibidas en esta institución, el Defensor del Pueblo vasco ha informado en un comunicado de que ha decidido abrir de oficio un expediente informativo para investigar las circunstancias de la actuación de la Ertzaintza.

Pasadas las 11 de la mañana, cientos de personas se encontraban en las inmediaciones del 'gaztetxe' (local juvenil) para expresar su apoyo a "Kukutza". En el barrio también se ven furgonetas de la Ertzaintza y contenedores tirados en la vía pública, mientras que un helicóptero de esta policía sobrevuela la zona.

Las personas que se encontraban en ese momento dentro del inmueble han lanzado cohetes y han hecho sonar una alarma, "como señal de llamada para que acudieran otras personas" y entorpecer así la labor policial, según ha comunicado Interior.

Los agentes han sufrido el lanzamiento de piedras, ladrillos y otros objetos que han causado destrozos en algunos vehículos aparcados en las inmediaciones.

Los incidentes se han extendido a calles adyacentes y los agentes antidisturbios han tenido que realizar varias cargas policiales, ha añadido Interior, que además ha explicado que a las 10:45 horas aún continuaba el desalojo.