El presidente del PNV en Bizkaia, Andoni Ortuzar, ha afirmado que el cambio de nombre del 'Partido Nacionalista Vasco' por el de 'Partido Nacional Vasco' respondería a la intención de reclamar "la libertad de la nación vasca", tras haber logrado a lo largo de más de cien años "despertar la conciencia nacional vasca". Además, ha pedido a la izquierda abertzale que, tras la condena por el caso Bateragune, demuestre valentía para seguir el camino emprendido desde "la unilateralidad".

En una entrevista concedida a Onda Vasca, recogida por Europa Press, Ortuzar ha considerado que, en el ámbito europeo, "en los últimos tiempos, cualquier término político que termine en 'ista' está asociado a extremos, puede ser a extrema derecha o a extrema izquierda, y no suenan bien la traducción al inglés o al francés porque tienen ese pequeño riesgo de compararse con partidos de corte extremista". "Eso introduce alguna dificultad en las relaciones internacionales", ha señalado.

Asimismo, ha apuntado que "debajo hay un debate mucho más profundo" y ha recordado que el PNV nació hace 116 años y lo creó Sabino Arana porque, "a pesar de que había unos territorios vascos con una soberanía original", en ellos no había "una conciencia nacional".

"Y él crea el PNV para hacer despertar esa conciencia nacional. 116 años después, afortunadamente, y también supongo que gracias a la labor del PNV, esa conciencia nacional ha despertado, la conciencia nacional de los vascos es muy fuerte y ahora lo que hace falta es que ese sujeto político, ese pueblo vasco que es una nación tenga un reconocimiento también como nación", ha subrayado.

Andoni Ortuzar ha insistido en que, "antes", su aspiración era "hacer despertar la conciencia nacional vasca", mientras que, en estos momentos, lo que desea es "la libertad de la nación vasca".

El presidente del BBB ha indicado que está intentando hacer "algo parecido" a lo que en Quebec supone el Partido Quebecois, lo que en Escocia supone el Scottish National Parti, y ha puntualizado que se trata de un fenómeno "muy corriente".

"Nuestra pretensión no es hegemonizar nada y menos el ámbito política nacionalista vasco abertzale, donde ya hay otras formaciones políticas que tienen otra forma de ver y entender la nación vasca. Lo que pretendemos es modernizar el término", ha añadido.

"lege berria"

En cuanto a la denominación en euskera de 'Jaingoikoa eta Lege Zarra' (Dios y Ley vieja), ha recordado que, en la ponencia, se hace "un brindis bonito" y se dice que hay que convertir la 'Lege Zarra (Ley vieja)' en 'Lege Berria' (Ley nueva).

"Los fueros y los derechos históricos originarios del pueblo vasco como fuente de inspiración y también como basamento, como pilar, para constituir la nueva Ley vasca, la nueva nueva Constitución vasca", ha apuntado.

Por ello, ha considerado que ya hay "un salto en el rescate de los derechos históricos como palanca de lanzamiento de la solución al conflicto político vasco", que, "junto al derecho a decidir, son los dos elementos fundamentales para llegar a un acuerdo sobre este país en el futuro".

Tras recordar que el PNV tiene 116 años y siempre ha tenido el derecho a decidir, la audodeterminación y la independencia "dentro de su ideario político" antes de que llegara a la lehendakaritza Juan José Ibarretxe, ha apuntado con éste al frente del Gobierno vasco, la formación jeltzale hizo "un intento muy sincero de llegar a un arreglo político para este país, una cuestión que sigue abierta".

"Y, desgraciadamente, Madrid le pegó un portazo y le cerró la puerta. Pero nosotros seguimos siendo un partido abertzale que busca una solución abertzale para este país. No es un 'Plan B' ni un Plan disfrazado ni nos ha secuestrado Bildu, como dice el señor Basagoiti. Somos el PNV de toda la vida que, en cada época, lo que intenta es ofrecer soluciones para que una de las razones fundamentales por las que nació, que es la libertad de la patria vasca, cuaje definitivamente", ha resaltado.

Andoni Ortuzar ha recordado que el PNV está preparando la hoja de ruta del partido para los próximos cuatro años y estos documentos surgen de cara a la próxima Asamblea General Extraordinaria de enero. En ella se establecerán las líneas políticas, sociales y sectoriales.

Tras recordar que ese cuatrienio habrá elecciones autonómicas, que previsiblemente se celebrarán en 2013, ha señalado que el documento que se apruebe en la Asamblea General será la propuesta del PNV para los comicios. BATERAGUNE

Además, se ha referido a la sentencia condenatoria por el 'caso Bateragune' y ha mostrado su deseo de que esto "no altere" los pasos dados hasta ahora por la izquierda abertzale. "La izquierda abertzale dijo que su apuesta era unilateral, con independencia de lo que, desde otros actores políticos, incluido el Estado español y sus poderes, pudieran hacer o entorpecer, y es el momento de que la izquierda abertzale recuerde ese compromiso suyo de unilateralidad, de que tiene que hacer su camino a pesar de los obstáculos", ha dicho.

El representante jeltzale ha reconocido que "la sentencia de Bateragune es un obstáculo, pero que la izquierda abertzale, con voluntad política, lo puede salvar y esperamos que lo salve". "La izquierda abertzale no le debe este proceso a Madrid ni debe hacer este proceso para que Madrid tenga una actitud más o menos proclive a un acuerdo político", ha señalado.

A su juicio, este colectivo "debe este proceso a la sociedad vasca". "Nosotros le pedimos a la izquierda abertzale valentía, coraje, firmeza, a pesar de estos obstáculos, para hacer ese camino que nos prometieron que iban a hacer", ha apuntado.

Para el dirigente del PNV, "lo peor que puede pasar a un sistema judicial es que todas sus decisiones tengan un tufillo político evidente por detrás porque debilita la credibilidad en el sistema y en cada una de las sentencias".

"Hubo un tiempo en Euskadi que muchos pensábamos que a ETA la dirigían los poderes del Estado porque no había manera de hacer las cosas tan mal y tan duras para este pueblo y ahora parece que el sistema judicial español están mandado también por alguien del núcleo más duro de ETA porque este tipo de sentencias son un freno, un paso atrás y un anacronismo en un tiempo nuevo para la política", ha añadido.