La Xunta incluirá en la próxima Lei de Medidas Fiscais para 2012, que acompañará a los presupuestos autonómicos, una tasa para el mantenimiento de los embalses de abastecimiento con el objetivo de recaudar 1,7 millones de euros al año que permitan a la Administración "atender las obligaciones" que los concesionarios de los servicios de explotación de presas "no asumen".

En declaraciones a Europa Press, el presidente de Augas de Galicia, Francisco Menéndez, ha explicado que este tributo —denominado Canon de Regulación— responde a un "cierto estado de abandono" que el Ejecutivo autonómico "detectó" durante la ejecución de las obras en los embalses de abastecimiento.

Estas infraestructuras son titularidad de la Administración autonómica y actualmente operadas en cuanto a su funcionamiento por las compañías gestoras de los servicios de abastecimiento. Pero, según ha indicado, ni estas compañías ni los titulares reales de las concesiones —los ayuntamientos— "realizan las labores de mantenimiento y conservación".

Ante esta "falta de asunción de competencias", Menéndez ha señalado que las obras, realizadas en las presas de Forcadas, Cecebre, Eiras, Con y Bahiña, fueron financiadas por la Xunta con un importe de más de 5 millones de euros, que ahora "necesitan conservarse", pues, como ha apuntado, "afecta a elementos importantes como la seguridad y a la operatividad de las piezas".

"La idea es que, o las operadoras asuman estas labores de conservación y mantenimiento de explotación de las presas, o que lo haga la Xunta y se lo repercuta a las compañías", ha asegurado el titular de Augas de Galicia antes de señalar que, en el caso de los aprovechamientos hidroeléctricos, el Ejecutivo autonómico "no realiza labores de explotación de ningún tipo" ya que "son las propias hidroeléctricas quienes asumen esos trabajos" bajo las "condiciones de seguridad exigidas".

"coste muy bajo"

Según ha explicado Francisco Menéndez, los costes de explotación de los embalses "deben asociarse al servicio de abastecimiento", consecuencia por la que se "crea esta tasa" que tendrá "un coste muy bajo" —de 1,7 céntimos por metro cúbico— que permitirán a la Xunta "atender las obligaciones que los concesionarios no asumen" gracias a una recaudación de 1,7 millones de euros.

De esta manera, los sujetos pasivos de esta medida serán las entidades suministradoras, que podrán repercutir el tributo a las entidades municipales o a los ciudadanos. Con todo, conforme ha apuntado Menéndez, la "cantidad es realmente baja" pues "una familia que pueda consumir 10 o 15 metros cúbicos" tendría que pagar "un total de 20 céntimos al mes".

Tal y como ha detallado la Xunta, la cuota de 1,7 céntimos "será única" para los usuarios de todos los embalses de abastecimiento gestionados por el Ejecutivo gallego, a pesar de que el coste por metro cuadrado en Bahíña (Baiona), por ejemplo, "es mucho mayor" que en Eiras (Vigo).

Entre otras cuestiones, para establecer esta tasa, el Gobierno gallego tuvo en cuenta datos como el coste anual de los gastos de funcionamiento y conservación de todas las presas, el gasto anual de administración de la Xunta imputable a dichas infraestructuras o la repercusión anual del 4 por ciento de las inversiones en obras realizadas por Augas de Galicia en concepto de amortización.