La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ana Botella, ha asegurado este miércoles que, si hay que hacerlo, el Gobierno central contestará a la Diputación de Castellón sobre la constitución del Consorcio de Aguas, tal y como ordena la sentencia del Tribunal Supremo sobre el minitrasvase del Ebro, pero ha considerado que está "fuera de lugar todo ese ejercicio manipulador que se está produciendo en estos momentos y confunde a los ciudadanos".

Botella se ha pronunciado así tras la inauguración del edificio de proceso de datos Walhalla de Castellón, tras ser preguntada por la sentencia del TS que obliga al Gobierno central a contestar sobre si se autoriza o no un consorcio de agua de Castellón para llevar a cabo el minitrasvase del Ebro.

Según ha dicho, "no hemos querido intervenir estos días ante las declaraciones absolutamente desatinadas o fuera de lugar de la consellera responsable del ramo, ya que hablamos de una cuestión procesal y, en ningún momento, se entra en el fondo del asunto", pues la sentencia "dice que se debe contestar desde el punto de vista procesal, pero no ha lugar la respuesta sobre la bondad o no de ese trasvase".

Respecto a la moción aprobada este martes por el pleno de la Diputación para exigir al Gobierno central de nuevo la autorización de la constitución del consorcio de aguas de Castellón y el minitrasvase del Ebro, Botella ha manifestado que "lo que se ve bien a las claras es que la política del agua del Gobierno de España ha sido firme, consistente y clara en todo este tiempo, y lo demuestra el hecho de que todas las inversiones que se han realizado han conllevado que en estos momentos las reservas hídricas en la Comunitat Valenciana sean muy importantes".

Así mismo, ha destacado que la reserva hidráulica de la cuenca del Júcar "supera a la del propio Ebro y en los últimos 10 años la reserva hidrográfica de la Cuenca del Júcar se ha duplicado, mientras que la del río Ebro está en -2,6 por ciento".

"Eso quiere decir que hay que apostar por una preservación de los recursos de una manera sostenible y, en ese sentido, los tres ejes en los que ha funcionado la política del agua del Gobierno socialista en estos ocho últimos años para la Comunitat han sido muy positivos porque ha sido la modernización de los regadíos, la preservación de los recursos o las desaladoras", ha señalado.

En su opinión, el PP "tiene un problema de definición de sus políticas, de rivalidad entre las comunidades autónomas y de desorientación, y la realidad es que nuestras reservas son positivas".