Un vecino de Lena se sentará este lunes en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo acusado de un delito de incendio forestal imprudente por el que la Fiscalía pide para él ocho meses de cárcel y ocho de multa hasta un total de 2.880 euros.

El Ministerio Público señala que el 11 de octubre de 2009 el acusado prendió 30 focos para quemar vegetación que invadía una finca de su esposa, "careciendo del preceptivo permiso de quema, con un riesgo alto de incendio, y sin respetar las distancias reglamentarias con el monte limítrofe".

De este modo, y tras abandonar el lugar "sin haber comprobado la absoluta extinción de todos los fuegos", estos se reavivaron afectando a solo 0,5 hectáreas de monte limítrofe por la intervención del helicóptero de Bomberos, que realizó 29 descargas de agua e incurrió en unos gastos de 2.905 euros y unos perjuicios ambientales de 6.630, que se le reclaman en concepto de indemnización.