El expresidente de Castilla-La Mancha y secretario general del PSOE en esa comunidad, José María Barreda, ha asegurado que estudia aceptar o no el ofrecimiento que este miércoles le hacía el secretario del PSOE de Ciudad Real, Nemesio de Lara, para encabezar la lista al Congreso de los Diputados por la provincia, de cara a las próximas elecciones generales.

En declaraciones a Punto Radio, recogidas por Europa Press, Barreda ha recordado que estaba previsto que fuera elegido senador por designación autonómica de las Cortes de Castilla-La Mancha, pero este ofrecimiento, ha aseverado, "me obliga a considerarlo. Lo voy a pensar".

Asimismo, el expresidente castellano-manchego ha asegurado que tiene claro que ya ha cumplido su etapa en Castilla-La Mancha. "Hay que saber retirarse", ha recalcado, y comprender que tiene que ser otro "equipo" quien se haga cargo "de las cosas".

Borrado informático

Después de que el Gobierno de María Dolores de Cospedal denunciara al Gobierno de Barreda por un supuesto borrado de archivos informáticos, el expresidente socialista ha dicho estar "muy tranquilo" y tener la conciencia "muy tranquila" porque no ha dado ninguna instrucción para que se destruya "nada".

"Ningún responsable lo ha hecho y los funcionarios no se prestarían a hacer nada irregular, no me cabe la mayor duda de ello, y tengo confianza en su deontología y en su profesionalidad", ha defendido el expresidente, y por tanto "estoy absolutamente tranquilo".

No obstante, ha desvelado que cuando tuvo conocimiento de la denuncia del PP se puso en contacto con los responsables informáticos de la Junta, los cuales dijeron que "de ninguna manera se había borrado ninguna información oficial", aunque sí que se ha borrado el listado de efemérides o "las listas de la gente a la que felicitábamos el cumpleaños". "Cosas de ese tipo", ha indicado.

Pero desde luego, ha señalado, lo que su Gobierno no ha hecho ha sido lo que hizo el equipo de José María Aznar que "borró" los archivos informáticos de Presidencia y "lo que tenía que ver con el gabinete de crisis del 11-M", y contrató a una empresa especializada a la que pagaron 12.000 euros. "No hemos hecho nada similar y que se parezca a eso", ha apuntado.

Es por ello, que Barreda enmarca esta denuncia en el "ruido y la distorsión" y en el "espectáculo poco edificante" que está haciendo el Gobierno de Cospedal tras su llegada a la Presidencia de Castilla-La Mancha.

Además, ha considerado que denunciar que han desaparecido facturas de la Administración regional es una acusación que "no tiene ni pies ni cabeza como se ha visto". "No se han roto facturas, de la misma manera que no se ha borrado ningún documento oficial ni nada por el estilo", ha insistido.

Barreda que insiste en estar "tranquilo" se muestra "asombrado" por la reacción que ha tenido María Dolores Cospedal. "Creo que de la misma manera que hay que saber perder hay que saber ganar, y lamentablemente la reacción no ha sido muy edificante, porque yo creo que en una situación de normalidad hay que entregar el testigo con limpieza y recibirlo con limpieza", ha destacado.

Igualmente, ha recalcado que él ofreció colaboración desde el primer momento, incluso también en el Debate de Investidura, pero no solamente Cospedal no ha aceptado esa colaboración sino que a lo ha que se ha dedicado es a poner en marcha una "persecución" con el objeto de "poder justificar o su inoperancia, o recortes en base de la herencia recibida".

Barreda ha recordado que él ofreció colaboración a Cospedal también cuando era presidente y la invitó en varias ocasiones a mantener reuniones y "lo rechazó", cosa que me parece "insólita", porque "lo normal" es que el presidente hable habitualmente, en este caso, con la que era la presidenta del principal partido de la oposición.

"Lo normal era que hubiéramos hablado con asiduidad y con normalidad, pero no fue posible no porque yo no lo intentara, lo intenté, sino porque ella se negó, y yo no he sido citado en ningún momento desde que ella ha sido presidenta, lo cual no me parece normal", ha indicado.

Respecto a la "herencia recibida" que denuncia el Partido Popular, Barreda ha manifestado tener la "cabeza muy alta" y saber "muy bien" el esfuerzo que se ha hecho en Castilla-La Mancha para conseguir que haya "una buena universidad, una de las mejores educaciones, una de las mejores sanidades, o donde mejor se aplica la Ley de Dependencia".

Creación de empleo

Ya centrado en temas nacionales, el expresidente de Castilla-La Mancha ha considerado "arriesgada" la promesa que ha hecho el PP de crear 3,5 millones de puestos de trabajo. "Creo que es lógico que se aspire a crear puestos de trabajo porque ese es el mayor problema que tenemos en España, pero me parece arriesgado cuantificarlo", ha dicho Barreda, que ha recordado lo que le pasó al Gobierno socialista con una promesa de creación de puestos de trabajo.

Barreda ha afirmado que el PP no tiene una "varita mágica" y ha opinado que un posible cambio de Gobierno no va a tener "efectos mágicos". "Si fuera así hasta yo mismo estaría dispuesto a votarlos, pero la realidad lamentablemente es más complicada, y vamos a seguir teniendo problemas muy importantes", ha augurado.

Finalmente, ha dicho que "lo razonable" es que hubiera una "responsabilidad compartida y un esfuerzo de todas" las fueras parlamentarias para "empujar en la misma dirección" y "no ponernos zancadillas".

Es por ello que Barreda ha pedido "alturas de miras" y ha rechazado "enfrentamientos de banderías" y comportamientos de "deseo de revancha", actitudes, a su juicio "lamentablemente" como las que "nos hemos encontrado en Castilla-La Mancha de manera muy injusta", ha concluido.