La presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha justificado su plan de ajuste asegurando que el déficit en la región "era del 4,9 por ciento a 30 de junio y con previsiones de llegar al 8 por ciento si no se cortaba antes".

Cospedal, que este domingo ha presidido en El Casar (Guadalajara) el Comité Ejecutivo Provincial del PP, ha indicado que el plan de ajuste se ha establecido en la región "por absoluta necesidad", ya que "siendo un Gobierno responsable" lo primero que había que hacer era "analizar la situación y decir a los ciudadanos la verdad de lo que se ha encontrado" al llegar al poder.

Con este plan, a juicio de la presidenta regional, "se va a poner en marcha el Gobierno para garantizar los Servicios Sociales y crear empleo", lo que representa "los objetivos del PP".

"Hemos encontrado unas cuentas públicas en quiebra, con una deuda pública de más de 7.000 millones y facturas no pagadas por más de 2.500 millones", ha agregado. "Hay que decir a los ciudadanos que esto es lo que nos hemos encontrado, pero que somos un Gobierno responsable que sabemos administrar su dinero".

El gobierno "más austero"

La dirigente 'popular' ha subrayado que Castilla-La Mancha "tendrá el Gobierno más austero que nunca ha tenido", con una Administración "en la que ya se han eliminado el 50 por ciento de los altos cargos y de puestos de libre designación" y en el que se están suprimiendo "todos los organismos que no son indispensables".

Además, Cospedal ha señalado que se puede garantizar lo que al llegar al Gobierno "no estaba garantizado" si se eliminan los "gastos de lujo" que a su juicio llevaba a cabo el Gobierno de José María Barreda y poniendo en venta "una flota de 2.500 coches oficiales" de la Junta además del patrimonio, algo aunque no quieren hacer, "no queda más remedio".

En este sentido, ha insistido en la necesidad de "no autorizar gastos como los que se han producido anteriormente", como por ejemplo "en televisiones de 9.000 euros para los despachos de los consejeros, en edificios de miles de millones de pesestas para consejerías y en multiplicación de empresas públicas para tener más y más cargos públicos a los que pagar más".