El Patronato de la Fundación Antonio Campillo se ha reunido para analizar el robo de las esculturas donadas por el titular de la institución y ha considerado "que tan extraordinaria agresión no solo representa un atentado a la cultura, sino también a la sensibilidad de un pueblo y de la sociedad en general". Por ello, condena a los autores materiales, como a los, en su caso, inductores y cómplices de tal acto.

La Fundación ha manifestado, en comunicado de prensa, la tristeza que el robo de las esculturas ha provocado en el Patronato y lamentado que hechos vandálicos como los realizados puedan llevarse a efecto en el marco de una convivencia civilizada, como la de Murcia.

Asimismo, indica, "el tiempo transcurrido vivido con la esperanza del hallazgo de las obras escultóricas, aunque afectadas en su integridad por la brutal y bárbara forma de llevárselas, ha dejado paso a la certeza de su destrucción irrecuperable, un hecho que pone de manifiesto la falta de sensibilidad de cuantos hayan participado en este acto vandálico, y falta de respeto para el conjunto ciudadano".

Además, "acciones de tal naturaleza no pueden provocar renuncia a mantener lugares públicos con obras de arte, porque tales exposiciones representan manifestaciones de la cultura de una ciudad, reconocimiento de sus hijos predilectos, orgullo y prestigio colectivo que en ningún caso pueden hacerse valer en el marco de un Estado-policía, aunque, en vista de lo ocurrido determinadas medidas de seguridad si tendrán que adoptarse", añade el Patronato.

Acciones necesarias

Por otra parte, puesto que las obras robadas formaban parte de un conjunto de nueve que fueron objeto de donación, por parte del escultor, a la ciudad de Murcia, acuerdan llevar a efecto las acciones necesarias para procurar la reposición de las mismas, "desde luego siempre con observancia escrupulosa de las exigencias legales".

Los miembros de la fundación han agradecido al presidente de la Comunidad Autónoma, el delegado de Gobierno de Murcia, al alcalde de Murcia, y por su mediación a las fuerzas de seguridad que se ocupan de la investigación, a la Policía Local, por las acciones que están llevando a efecto; y a cuantas instituciones y personas han manifestado su repulsa.