Mucha presión

Si se atiende a los datos de la Plataforma 10 Minutos, se puede decir que el 87,8% de los médicos de atención primaria están agotados emocionalmente. Y no de forma gratuita.

«Uno de los niveles de retribución más bajos de Europa», «la congelación del gasto sanitario, la falta de reconocimiento y la alta presión asistencial (demasiados pacientes) son las tres variables que acaban afectando al carácter y trabajo de nuestros médicos de cabecera», resume el responsable de la plataforma en Galicia, Manuel Martín.

Asegura que las bajas laborales en atención primaria duplican a las que se dan en el resto de especialidades. Las últimas memorias del Sergas reflejan este mayor absentismo en los centros de salud.

Y si esto es preocupante  no lo son menos otros aspectos que revela el estudio del Consello: el 25% de los médicos dejaría la profesión y un 31% cambiaría de puesto dentro del sistema sanitario. Lo que nos deja que sólo el 44% está más o menos satisfecho con su trabajo.

Acoso laboral

Un descontento derivado del burn out, pero también de la sensación de acoso laboral (real o no) que el 27% de los facultativos siente. Y apuntan a dos partes: a la administración (el propio Sergas) y a los pacientes (por ser demasiados).

De Sanidade esperan un mayor reconocimiento económico y profesional. Es decir, más salario y algún tipo de incentivo que reconozca el buen hacer. Ante estas carencias «se sienten frustrados», asegura Martín. Y además, «hay una masificación brutal». La solución: más médicos.

Pacientes de más

32% de exceso en los centros de salud: Lo dice la Plataforma 10 Minutos. Según un estudio de esta agrupación sobre atención primaria, los médicos de cabecera no deberían atender más de 24 pacientes al día. De media tienen 32. Para los pediatras se piden 14 por los 22 actuales.

Casi 400 urgencias al día en el hospital: Es la media de los servicios de urgencias del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Xeral-Cíes).

4 preguntas sobre...

1 ¿Qué es el burn out?

Es un síndrome crónico de adaptación. Refleja la frustración de quien lo padece entre sus expectativas y la realidad laboral. La insatisfacción profesional se traduce en agotamiento físico y mental.

2 ¿Cuáles son sus síntomas?

El agotamiento emocional se traduce en irritación. También se da una despersonalización que puede dar lugar a conductas agresivas y de insensibilidad. Falta de concentración, trastornos del sueño, déficit de memoria, menor rendimiento laboral y absentismo son otros de los síntomas.

3 ¿Los médicos están más quemados?

Sí. Este síndrome puede afectar a todas las profesiones y oficios, pero se ceba en las personas que prestan ayuda al público: personal sanitario, trabajadores sociales, profesores, etc...

4 ¿Es una enfermedad?

Legalmente, este síndrome está considerado un accidente laboral. Así lo estableció el Tribunal Supremo en un sentencia en 2001.