Zapatero deja en manos de Rubalcaba las negociaciones para la reforma constitucional

  • El presidente del Gobierno anunció el miércoles en el Congreso una propuesta para limitar mediante la Carta Magna el déficit público.
  • El candidato socialista quiere que "la letra pequeña" de la medida garantice flexibilidad al futuro Gobierno y que no se produzcan recortes sociales.
  • Pérez Rubalcaba ya se ha puesto a trabajar con el portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, encargado de negociar con el PP.
Alfredo Pérez Rubalcaba.
Alfredo Pérez Rubalcaba.
Gustavo Cuevas / EFE
Alfredo Pérez Rubalcaba.

La propuesta de reforma de la Constitución lanzada el miércoles por el presidente Rodríguez Zapatero en el Congreso con el objetivo de limitar el déficit público es ya un problema de Alfredo Pérez Rubalcaba. El candidato socialista para las elecciones del 20-N, ha decidido asumir las riendas de la negociación con el PP para lograr el máximo consenso y garantizar una flexibilidad suficiente.

Fuentes de la dirección del PSOE han confirmado que Rubalcaba ya se ha puesto a trabajar junto al portavoz parlamentario de los socialistas, José Antonio Alonso, encargado de negociar con su homóloga del PP, Soraya Sáenz de Santamaría.

Rubalcaba quiere asegurarse de que "la letra pequeña" de la reforma garantiza que el Gobierno de turno tenga margen de maniobra ante hipotéticas situaciones de emergencia en las que podría ser necesario no mantener un déficit cero, tal y como se encargó de avanzar el miércoles. En concreto, quiere que quede claro que esta reforma no va a suponer nunca recortes sociales.

También propone el candidato ampliar el consenso en torno a esta reforma al mayor número posible de fuerzas parlamentarias -que sea similar al alcanzado al aprobar la Constitución en 1978- más allá del PP: Rajoy mostró públicamente su apoyo a la medida.

Voces discrepantes

En el PSOE ya han surgido varias voces críticas con la propuesta de Zapatero, hecha pública durante el debate de convalidación de un decreto ley con nuevas medidas contra el déficit público y que tiene que ser aprobada antes de que se disuelvan las Cortes Generales.

Su aprobación en esta legislatura obliga a agilizar al máximo los trámites parlamentarios, de manera que ya se han anunciado sendos plenos extraordinarios para la próxima semana en el Congreso con el fin de dar luz verde a la iniciativa, que tiene que pasar también por el Senado.

Al tratarse de una reforma de la Constitución necesita el apoyo de los tres quintos de los miembros del Congreso y del Senado, lo que obliga al PSOE y al PP a votar juntos. Por ahora, tanto el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, como la diputada de UPyD, Rosa Díez, se han manifestado a favor de celebrar un referéndum para su aprobación.

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