El Gobierno de Aragón ha exigido por escrito al Ayuntamiento de Zaragoza y a la sociedad Tranvías que cumpla la Ley de Patrimonio Cultural Aragonés en la ejecución de las obras de la II Fase del tranvía, ya que éstas han comenzado sin tener la preceptiva autorización de la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural, requisito exigido por la citada ley.

Asimismo, el Gobierno aragonés ha explicado en un comunicado que ni dicha Comisión ni la Dirección General de Patrimonio habían recibido el proyecto de obras hasta este viernes, al hacerse efectivo el requerimiento.

Dada esta vulneración legal, el Director de Patrimonio del Gobierno de Aragón ha dirigido este viernes una carta a la teniente de alcalde de Servicios Públicos, Carmen Dueso, y al gerente de Tranvías de Zaragoza, Alejandro Moreno, instando a la suspensión de las obras y solicitando a los arqueólogos municipales un informe de las actuaciones realizadas hasta el momento y las posibles afecciones producidas en los tramos del paseo de Independencia y Murallas.

Esta actuación del Gobierno de Aragón se ha producido tras el informe urgente solicitado por la consejera de Educación, Universidad, Cultura y Deporte, Dolores Serrat, sobre la protección del patrimonio cultural afectado por las obras.

En dicho informe, elaborado por los servicios de Prevención y Protección de Patrimonio Cultural del Gobierno aragonés, se indica que cualquier actuación en un bien de interés cultural o en su entorno debe ser autorizada por la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural de Zaragoza, en cuya unidad gestora se ha constatado que no se ha presentado ningún expediente relacionado con dichas obras.

Así, en el punto dos del informe se afirma que "por parte de la entidad promotora, Ayuntamiento de Zaragoza, y de la entidad adjudicataria, Construcción Tranvía Zaragoza UTE Diseño y Construcción se han incumplido los trámites obligatorios de obtención de autorización de la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural de Zaragoza, tal como establece la normativa (Ley 3/1999, de 10 de marzo, de Patrimonio Cultural Aragonés)".

Tras mantener diversas reuniones a lo largo de este viernes, y para evitar mayores afecciones a los ciudadanos, la consejera no ha hecho efectiva la paralización total de las obras, sino que ha exigido su ralentización en aquellos tramos que afecten a bienes de interés cultural, y el control de los trabajos por parte de los arqueólogos municipales hasta que se reúna la Comisión de Patrimonio.

En este sentido, ha mostrado su disposición a convocar una reunión extraordinaria (la ordinaria debería haberse celebrado en septiembre) en aras a minimizar las molestias a los ciudadanos.

El Gobierno ha indicado que el proyecto del tranvía afecta a los siguientes bienes de interés cultural: Antigua Facultad de Medicina (Paraninfo), el Palacio de la antigua Capitanía General, el Palacio de los Condes de Sástago. Diputación Provincial, el Casino Mercantil, el Palacio de los Morata o Luna. Audiencia Provincial, el colegio de las Escuelas Pías en la calle Conde Aranda, el mercado de Lanuza (Mercado Central), la Muralla Romana y Torreón de la Zuda y la iglesia de San Juan de los Panetes.

Además, el paseo de la Independencia conserva en el subsuelo varios elementos patrimoniales de entidad. Por una parte, en el tramo comprendido entre la calle Cádiz y la Cinco de Marzo se conservan, sellados, los restos de uno de los arrabales islámicos de la Zaragoza musulmana, fechados entre los siglos X-XII, así como restos constructivos de la planta de un edificio religioso posterior a la reconquista de la ciudad.

Por otra parte, coincidiendo con el tramo citado y extendiéndose hasta casi la Plaza Aragón, se ha documentado la existencia de la necrópolis vinculada a la antigua basílica paleocrististiana de Santa Engracia.