La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, se ha mostrado segura de que los dos nuevos miembros del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha, Emilio Sanz y Fernando Torres, realizarán su tarea con "lealtad, profesionalidad y templando las circunstancias de cada momento" y sabiendo que las leyes y normas "son buenas siempre que permitan el normal desarrollo de la actividad humana".

Así lo ha expresado Cospedal, durante el acto en el que Sanz y Torres han jurado su cargo este jueves en el Palacio de Fuensalida como miembros del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha.

La presidenta ha agradecido a los dos nuevos consejeros que dijeran "sí" unos segundos después de ofrecerles el cargo, dejando de lado "otros quehaceres" y ha definido su nuevo cometido como un "reto apasionante".

Cospedal ha explicado que esta nueva etapa que comienzan no es desconocida para ellos, pues como juristas ya han dedicado tiempo al servicio público y ahora lo van a hacer "de manera diferente", pues van a formar parte del máximo órgano consultivo de Castilla-La Mancha.

La presidenta ha agradecido en nombre del presidente del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha, José Sanromá, y en presencia de las dos consejeras salientes "el trabajo realizado por el consejo los último años", y que hayan actuado "con lealtad y sobre el principio de la legalidad e igualdad de todos los ciudadanos ante la ley".

La presidenta ha indicado que para un jurista es un "honor y un orgullo formar parte de un órgano de estas características", ha dado la enhorabuena a las familias y les ha pedido ayuda para que los nuevos consejeros puedan desarrollar su función "de manera libre e independiente".