La baronesa Thyssen amenaza con atarse a un árbol frente a su museo para evitar que lo corten

"Me llevaré la tartera con comida y bebida, y ya veremos quién me mueve de ahí", amenaza Carmen Thyssen-Bornemisza, que no está de acuerdo con la reforma del Paseo del Prado que planea Gallardón.El proyecto incluye una vía de cinco carriles, que pasará más cerca del museo, por lo que los árboles centenarios situados junto enfrente habrán de ser trasplantados.

"Todo el mundo sabe que es imposible trasplantar árboles de ese tamaño y que la mayoría morirán", explica la baronesa en el diario El País.

Según el proyecto del ayuntamiento de Madrid, responsabilidad de cinco arquitectos -entre los que destaca el portugués Álvaro Siza-, los 110.000 vehículos que circulan diariamente por el paseo del Prado pasarán más cerca del Museo de la Fundación Thyssen-Bornemisza.

"Quieren ponernos una autopista delante, y encima lo harán cortando una arboleda única", explica la baronesa. Los árboles que adornan la entrada de su museo fueron plantados en el siglo XVIII por Carlos III.

La baronesa, atada y con tartera en mano

El Ayuntamiento ha previsto un plan de remodelación de la arboleda en la zona y plantar más árboles de los existentes, aunque antes quitará 700.

Buscaré a otros amantes de la naturaleza y nos ataremos a cada árbol
"Buscaré a otros amantes de la naturaleza como yo y nos ataremos a cada árbol para impedir que acaben con ellos, son divinos, una belleza. Me llevaré la tartera con comida y bebida, y ya veremos quién me mueve de ahí".

"Durante el último periodo de Información Pública hemos tenido alegaciones de todas las instituciones, pero en el Thyssen no han dicho nada", asegura Carlos de Riaño, arquitecto responsable del proyecto junto a Siza.

"Todo esto me parece sorprendente. Han tenido su momento para hablar y no lo han hecho. Todos los museos y centros de arte están encantados con el proyecto, y el Thyssen también se beneficia".

De Riaño dice que el paseo del Prado es hoy "intransitable". "Las colas impiden el paso, y ni siquiera pueden parar tranquilamente los taxis".

Con la reforma, los peatones ganarán siete metros de acera
"Con la reforma ganarán siete metros de acera, y el tráfico de coches, cada vez más absorbido por la M-30, disminuirá notablemente".
Mostrar comentarios

Códigos Descuento