Desplazarse el lunes por Madrid resultó, si cabe, aún más complicado que un día normal.

Las carreteras, atascadas, y el Metro, poco menos debido al primero de la nueva tanda de paros parciales convocado por el Sindicado de Conductores del Metro de Madrid (SCMM) durante los meses de abril y mayo.

Aunque el Sindicato de Conductores no indicó que se hubiera producido una avería, una lectora, Bea, nos informó de que se había producido un incidente en la línea 10 de Metro, en la estación de Alonso Martínez.

Poco antes de las 8.00, al Metro en el que viajaba se le averió una puerta, por lo que fue necesario desalojar el tren, acción que se demoró porque algunas personas se negaban a bajar.

"Después de 15 minutos de rifirrafes el metro averiado se ha ido y nosotros hemos tenido que esperar a otros tres trenes porque los que venían iban hasta arriba de gente y no cabíamos. He llegado a Plaza Castilla a las 8:40". Nos cuenta Bea en un correo electrónico enviado a madridweb@20minutos.es.

Otra avería en la línea 6

Algunos lectores, como Blanca, también informaron de una pequeña avería sobre las 8.40 en Laguna (línea 6), que afectó a la estaciones cercanas. La empresa registró a esa hora una mayor afluencia de viajeros entre Legazpi y Méndez Álvaro.

Esta línea sufrió por la tarde otra avería en la misma estación, la de Laguna, que provocó que muchos usuarios se concentrasen en las estaciones anteriores como Carpetana, Oporto y Lucero.

La incidencia, según fuentes de Metro, fue solucionada en unos 10 minutos.

De esta manera, sigue la tradición de que de las averías en las líneas del suburbano durante las horas de paro, algo que llegó a ser habitual durante las seis jornadas anteriores de huelga.

De 6.45 a 9.15 circularon doce trenes más de los previstos, informó Metro de Madrid, cifra que no concuerda con la ofrecida por el sindicato convocante, que indicó que el 100% de los conductores ha secundado la movilización.

Mientras, en las protestas de la tarde, entre las 18.30 y las 21.00 horas, prestaron servicio cinco trenes más de los inicialmente pactados, lo que supone un 5% más, según la empresa.

Andenes llenos de pasajeros

En las principales estaciones de la red se produjeron importantes aglomeraciones, informó el portavoz del SCMM, Eloy Gómez, quien echa la culpa de este colapso a la empresa, que no comenzó a informar de los paros parciales hasta el pasado viernes.

Metro de Madrid indica que estas son "valoraciones" del sindicato y considera que el aviso se produjo en el momento adecuado.

"El Metro hoy era un infierno", ha comentado alguno de los pasajeros que utilizó por la mañana la red del suburbano.

Estos paros se repetiran todos los lunes, miércoles y viernes no festivos hasta que acabe el mes de mayo, si conductores y Metro de Madrid no lo remedian antes con un acuerdo.

De momento, éste parece lejano. La empresa no acepta ninguna de las reivindicaciones de los conductores (relativas a formación, peligrosidad, toxicidad y falta de seguridad en el puesto de trabajo), porque cree que todas sus reivindicaciones ya fueron atendidas en el convenio firmado por todos los trabajadores a mediados del pasado año.

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