El presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha reclamado "silencio" mientras medita su decisión sobre el futuro del proyecto de Colegios del Mundo Unidos, cuya sede en España está prevista ubicarse en la localidad cántabra de Comillas.

Esta afirmación de Diego se produce justo un día después de que se reuniera con el presidente de la fundación Comité Español de los Colegios del Mundo Unido, el infante don Carlos de Borbón, en un encuentro tras el cual ninguno de los dos quiso hacer declaraciones a la prensa.

"Asumo mis silencios", ha admitido ante el Parlamento el presidente, que ha justificado que se trata de "silencios de responsabilidad, serios y de análisis", tal y como ha respondido al ser increpado por la portavoz socialista y ex consejera de Educación, Rosa Eva Díaz Tezanos, por su silencio sobre este tema.

En el Pleno en el que ha informado a la Cámara de la composición del nuevo Gobierno surgido tras la mayoría absoluta del PP en las elecciones autonómicas, Diego ha advertido de que él "no ha firmado" el convenio para la cesión de los 44.000 metros cuadrados del terreno y los "magníficos" edificios de Comillas, durante 99 años, a una fundación privada.

"Nosotros tampoco firmamos un convenio que obliga a Cantabria a pagar 58 millones de euros", ha insistido Diego, quien ha criticado que el Ejecutivo regional firmara el convenio con Colegios del Mundo Unido el 1 de julio, después de las elecciones del 22 de mayo y cuando ya eran un Gobierno saliente, "en funciones" y "cuando ya los cántabros le había dicho que no gestionaran".

A pesar de ser "conscientes" de la "importancia" y lo "loable" de los fines de la Colegios del Mundo Unido, Diego ha pedido a la oposición que deje al Gobierno "estudiar" el proyecto. "Y mientras, callemos", ha añadido.