El número de casos positivos en los controles de alcoholemia que se realizan en las carreteras cántabras se ha reducido del 2,4% al 1,3% en los últimos siete años, cuando se inició una campaña de 'tolerancia cero' en los accidentes de circulación, con especial incidencia en el consumo de alcohol y el exceso de velocidad.

Así lo ha destacado este jueves el delegado del Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, que ha entregado dos vehículos para el control de alcoholemias a los ayuntamientos de Santander y Laredo.

Tras el acto, en el que han participado el primer teniente de alcalde de la capital y concejal de Protección Ciudadana, Samuel Ruiz; el alcalde de la villa pejina, Ángel Vega; el jefe provincial de Tráfico, Serafín Sánchez; y la fiscal de Seguridad Vial, Felicidad Andrés, el delegado del Gobierno ha explicado que, en lo que va de año, se han realizado más de 77.000 controles de alcoholemia en la Comunidad.

En este sentido, Ibáñez ha anunciado que estos controles se van a intensificar, ya que se ha "avanzado" en la prevención del consumo "pero no lo suficiente".

Al hilo de lo anterior, ha apuntado que en más de 800 casos de accidentes mortales de tráfico estudiados, una de cada tres víctimas dio positivo en el análisis de consumo de alcohol. No obstante, el jefe de Tráfico ha destacado que, en lo que va de año, se han registrado 11 muertes en las carreteras nacionales de Cantabria y en ningún caso el consumo de alcohol fue la causa.

En cualquier caso, se va a insistir para atajar este problema, en colaboración también con ayuntamientos como los de Santander y Laredo, que disponen a partir de ahora de un nuevo coche con el que sus policías locales podrán efectuar controles preventivos. Ambas monovolúmenes se podrán utilizar desde este fin de semana y se sumarán al parque de vehículos municipales de cada consistorio.

El delegado del Gobierno ha recordado que Santander lleva "muchos años" realizando, a través de sus agentes locales, más controles de alcoholemia, que se suman a los que realizan los efectivos de tráfico.

En cuanto a Laredo, ha apuntado que supone "otro punto importante" de volumen de tráfico, por la confluencia de carreteras que hay en el entorno de la villa y la "abundancia" de coches que circulan en verano.

COLABORACIÓN

Ibáñez ha agradecido a Ruiz y Vega el "esfuerzo" de ambos ayuntamientos, más si se tiene en cuenta que en los últimos años ha aumentado el número de personas que mueren en accidentes en carreteras urbanas y que dan positivo en las pruebas de alcohol.

El primer teniente de alcalde de Santander ha mostrado la colaboración del Ayuntamiento con Tráfico para prevenir el consumo de alcohol al volante y reducir la siniestralidad en las carreteras.

Ha indicado que el coche estará a cargo de dos o tres agentes, en función del operativo que se habilite y de la disponibilidad de efectivos, y ha recordado que no es el primer vehículo que esta Administración recibe de la Delegación del Gobierno.

Por su parte, el regidor laredano ha enfatizado que este vehículo es "más moderno" que el resto de los que dispone el Consistorio, y ha subrayado que cuenta además con radar para controlar la velocidad.

Según Vega, este tipo de equipamientos redundan en una mejora de la seguridad vial y ciudadana, ya que en los accidentes de tráfico, especialmente en vías urbanas, pueden verse involucrados tanto conductores como peatones.

VEHÍCULOS

Estos vehículos se ceden de forma temporal para realizar los controles de alcoholemia en mejores condiciones por parte de ambas policías locales.

Esta medida responde al "interés" del Ministerio del Interior y la Dirección General de Tráfico de incrementar los controles que se llevan a cabo en los ámbitos urbanos.

Con ello, también se quiere "mejorar la colaboración entre el Gobierno de España y los ayuntamientos en las tareas de seguridad vial" para "seguir incidiendo" en las políticas de prevención de los accidentes, especialmente los relacionados con el consumo de alcohol.