La Comisión de Educación del Parlamento de Andalucía, reunida este martes con carácter extraordinario, ha aprobado el dictamen 'La Formación del Profesorado del Siglo XXI' con los votos a favor del PSOE-A e IULV-CA y la abstención del PP-A. Además, se ha resuelto —por unanimidad en este caso de todos los grupos políticos— la elevación del informe al Pleno de la Cámara andaluza que, previsiblemente, se celebrará durante el próximo mes de septiembre.

'La formación del Profesorado del Siglo XXI' es un documento elaborado en el seno del Grupo de Trabajo relativo a la formación del profesorado andaluz que se constituyó a finales de 2010 en el Parlamento y que, desde entonces hasta la pasada semana, ha escuchado y analizado las aportaciones y sugerencias de un total de 30 organizaciones y entidades del ámbito educativo. Con todas ellas, así como con las de los grupos parlamentarios de PSOE-A, PP-A e IULV-CA, se ha elaborado un dictamen final con 92 recomendaciones que, tras una puesta en común en el día de ayer, este martes finalmente se ha aprobado con diez votos a favor (los de los diputados de PSOE-A e IULV-CA) y cuatro abstenciones (PP-A).

Según ha explicado la portavoz 'popular' en la Comisión, Rafaela Obrero, su formación se ha abstenido de aprobar el dictamen y ha emitido un voto particular al respecto al considerar que en las conclusiones finales no se han introducido cuestiones que su grupo considera "básicas" como la mejora de las condiciones laborales del profesorado en una apuesta por el "esfuerzo, el mérito, la exigencia, la disciplina o el respeto", o como la personación de oficio ante los tribunales por parte de la Consejería de Educación en los casos de agresiones a maestros y profesores.

Estos argumentos han sido duramente criticados por la portavoz de Educación del PSOE-A, Araceli Carrillo, quien ha afeado a Obrero que saque a relucir cuestiones "que no han sido objeto de debate de este grupo de trabajo" pero que sí lo fueron, el año pasado, en el celebrado sobre la convergencia educativa y cuyo dictamen final, tal y como recordó Carrillo, "fue rechazado por el PP-A, que primero se abstuvo y finalmente votó el contra en el Pleno". "Tuvieron la oportunidad y la desaprovecharon. Ahora no toca hablar de reforzar los contenidos de las materias instrumentales o de la condición de autoridad pública del profesorado, que le recuerdo que llevan cacareándola durante tres años y todavía no la han traído al Parlamento", le reprochó a Obrero.

Ante ello, además, recomendó a los 'populares' que "analicen y lean con detenimiento" el dictamen sobre el profesorado del siglo XXI durante el verano y que "cambien su voto a positivo" de cara al Pleno del próximo mes de septiembre porque, según Carrillo, este documento incluye 16 de las 23 propuestas relacionadas con la mejora de la formación docente que presentó el PP-A, "seis de ellas de forma literal y diez dentro de otras más extensas o transaccionales".

Otro voto particular de iulv-CA

Por su parte, de las 43 propuestas presentadas por IULV-CA, el dictamen final ha recogido 40. De ahí que este grupo parlamentario haya presentado un voto particular para que "conste" que las consideran "irrenunciables". Según ha explicado el portavoz Ignacio García, se trata de "la eliminación progresiva de las diferencias entre las categorías profesionales de Infantil y Primaria y Secundaria", de la "unificación a la baja" de los precios de los Máster en Secundaria que ofrecen las distintas universidades andaluzas y, finalmente, de la implantación en los centros privados sostenidos con fondos públicos de métodos de selección del profesorado como los de los centros públicos. "Estos mecanismos no pueden ser tan arbitrarios como la afinidad o fidelidad ideológica", ha apostillado.

Aún así, García se ha mostrado "satisfecho" con el trabajo realizado por el grupo de trabajo por cuanto que "demuestra que la enseñanza en Andalucía tiene futuro porque está dispuesta a cambiar y a mejorar en todos los aspectos". Eso sí, ha pedido a la Consejería de Educación que ahora "no reduzca estas 92 recomendaciones y se comprometa con todas ellas y cumpla su parte", toda vez que la Comisión de Educación ha hecho "todo lo que se esperaba" de ella.

También Carrillo ha alabado la tarea realizada por el grupo y ha agradecido especialmente la labor de "todos los que lo han hecho posible", desde los intervinientes en las diferentes sesiones hasta los ujieres del Parlamento. Sobre todo, ha destacado, porque con este documento "Andalucía ha tomado, otra vez, la iniciativa" y se ha "elevado como altavoz de una reflexión colectiva como es la preocupación y el interés por mejorar nuestro sistema educativo".

Algunas de las propuestas

Entre las 92 propuestas recogidas en 'La formación del profesorado del Siglo XXI' está, entre otras, la de instar al Gobierno de la Nación a establecer un nuevo modelo de acceso a la función pública docente que "potencie la parte práctica" y en el que se "incluya una prueba en la que se pueda medir la capacidad del candidato o candidata para transmitir conocimientos y para gestionar la realidad concreta de un aula".

Es decir, una prueba que, a diferencia del actual sistema de selección (basado en el concurso-oposición), valore más y mejor las habilidades pedagógicas y comunicativas del futuro docente, capacidades éstas que debe reunir la persona que quiera dedicarse a la enseñanza, según se desprende del 'perfil' elaborado por este grupo de trabajo y en el que destacan, por ejemplo, la necesidad de tener "facilidad para la comunicación y relación personal", el "interés y aprecio" por la profesión docente, un nivel cultural elevado, tener dotes de liderazgo o dominio de un idioma extranjero.

Además, en el documento también se propone "garantizar que la selección del personal funcionario para el ingreso en los distintos cuerpos docentes cuente con una fase de prácticas que se realizará en centros de distintas características y que tendrá la duración de, al menos, un curso académico, en el que se comprobará el grado de desarrollo de las competencias profesionales de cada candidato o candidata". "La evaluación de esta fase de prácticas permitirá comprobar la competencia profesional del aspirante. Este procedimiento debe entenderse como parte de la formación inicial del profesorado", añade la medida 32 de este dictamen, al que ha tenido acceso Europa Press.

Eso sí, se advierte también de que, en ningún caso, esta asignación de materias, cursos o niveles al profesorado en práctica implique "asumir una tutoría en solitario", sino que se realice "atendiendo exclusivamente a criterios pedagógicos".

Con todo ello, según se argumenta en el mencionado documento, se podrán evitar las "paradojas" que el sistema de selección actual lleva adscritas, como el hecho de que la fase de oposición se base solo "en la comprobación de unos conocimientos adquiridos en la Universidad que no suelen coincidir con las capacidades necesarias para un buen desempeño en el aula" o la de que, precisamente por la "dificultad" de superar esta primera fase de oposición, haya buenos y experimentados profesionales que no consigan su plaza como funcionario docente.

También se incide mucho en la necesidad de una "parte práctica" no solo una vez adquirida la condición de funcionario, sino antes, durante la formación de los futuros docentes en la Universidad. No en vano, Andalucía propondrá al Gobierno central —tras la previsible aprobación del dictamen en el Pleno el próximo mes de septiembre— que, además de subir la nota de corte en el Grado de Magisterio para "iniciar una progresiva reducción del número de alumnos por grupo" universitario, se complete esta selección previa con "otro tipo de herramientas psicotécnicas que permitan comprobar la motivación y la posible adaptabilidad del aspirante a docente a las condiciones y capacidades exigibles al profesional".