La Policía Local y la Guardia Civil han detenido, en una operación desarrollada en el paseo marítimo de La Cala de Mijas (Málaga), a cuatro personas de nacionalidad senegalesa por, presuntamente, vender productos falsificados.

Este servicio fue activado tras las numerosas denuncias recibidas en el Ayuntamiento por vecinos y comerciantes de La Cala de Mijas ante la supuesta actividad ilícita que estaban ejerciendo los cuatro detenidos.

Uno de los detenidos presentó resistencia, iniciándose una persecución a lo largo del paseo marítimo, que concluyó en la playa del Bombo, según han informado en un comunicado desde el Ayuntamiento de Mijas.

Desde el Consistorio han indicado que "no sólo hacían competencia desleal a los negocios de la zona, vendían productos sin licencia que imitaban a marcas consolidadas en el mercado y ofrecían a los viandantes grabaciones ilegales de música o de películas, sino que, además, ocupaban los bancos instalados en el paseo marítimo".

Tanto los detenidos, a los que se les acusa de delitos contra la propiedad industrial e intelectual, como el numeroso material incautado —bolsos, relojes, prendas de vestir y CD— han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.

El alcalde de Mijas, Ángel Nozal, a su vez máximo responsable de la Policía Local, ha dado instrucciones para erradicar del municipio este tipo de prácticas, que atentan contra los derechos de los comerciantes legalmente establecidos.

Denuncias a propietarios de perros

Por otra parte, efectivos de la Policía Local de Mijas han denunciado a dos propietarios de perros por no recoger los excrementos de sus animales de compañía de la vía pública, como obliga la Ordenanza Municipal de Seguridad y Convivencia Ciudadana.

Tras las denuncias, los servicios administrativos municipales han abierto el correspondiente expediente sancionador contra los propietarios de animales de compañía denunciados.

Según esta ordenanza, este tipo de conductas incívicas está considerada como una falta de carácter grave, por lo que los propietarios denunciados se enfrentan a sanciones que oscilan entre los 750 y los 1.500 euros, llegando, incluso, a los 3.000 euros en el caso de reiteración.

El portavoz municipal del equipo de gobierno del PP, Mario Bravo, ha señalado que "no podemos tolerar que las calles de Mijas abunden los excrementos de perros, puesto que afecta de forma muy grave a los intereses turísticos del municipio, además de suponer un problema de salud pública".