El accidente, según Javier González, director de ingeniería del Metro, ocurrió pasadas las 3.00, cuando el suburbano aún no está abierto al público. Los obreros trabajaban en la estación de Puerta del Ángel (Línea 6) a bordo de una dresina, un vehículo autopropulsado con plataforma en la que se suben los operarios para hacer el mantenimiento de las catenarias, los cables eléctricos de los que se nutren los vagones.

La dresina fue embestida por un T4, una especie de «camión» que iba cargado con vigas de acero. El vehículo se encontraba entre Moncloa y Argüelles. Al parecer, el conductor se bajó y puso el freno de mano, pero éste falló. El T4 circuló entonces sin control a unos 50 km/h, hasta chocar con la dresina. El impacto fue tan fuerte que ambos vehículos se desplazaron más de 200 metros. Cañedo y Muñoz murieron en el acto.

La línea entre Argüelles y  Lucero estuvo cerrada hasta las 19.20. Las cinco estaciones afectadas tuvieron en la Semana Santa de 2005 una media de 118.820 viajes.