En 2010 se registraron 14 ingresos por golpe de calor en los hospitales de la Comunitat de los que fallecieron 4

VALENCIA, 15 8

Europa press)

Este verano se espera que sea en la Comunitat Valenciana más fresco con temperaturas más bajas que en los dos años anteriores con precipitaciones normales, un poco más seco de lo normal. Además, no se prevén diferencia entre la primera y segunda parte del estío, según las previsiones de CEAM.

Así, lo han señalado este martes el director ejecutivo de la Fundación del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), Millán Millán, en la rueda de prensa junto al conseller de Sanidad, Manuel Cervera, para presentar el Programa de actuación frente a Temperaturas Extremas para 2011, que se ha activado hoy y que se extenderá hasta el próximo 30 de septiembre.

Cervera ha explicado que este programa se activa desde el año 2004 para "prevenir, minimizar y evaluar" los impactos en la salud de la población derivados de las altas temperaturas en la Comunitat, que el pasado año causaron 14 ingresos hospitalarios de los que fallecieron cuatro personas. En 2009 y 2008, se registraron 10 ingresos y 2 fallecidos frente al único ingreso, sin resultado de muerte, registrado en 2207.

Al respecto, ha aclarado que no es que hayan aumentado el número de fallecimientos por golpe de calor, sino que etiquetan así muertes que hace tres o cuatro años no se consideraban así cuando había enfermedades graves asociadas.

Para controlar las posibles olas de calor, ha destacado que desde 2006 se colabora con CEAM porque dispone de un sistema propio de vigilancia meteorológica para la Comunitat frente a los años anteriores, en los que el programa estaba basado en información del Instituto Nacional de Meteorología.

De este modo, frente a la división en tres provincias del Plan Nacional de Actuación, se dividió la Comunitat en 30 zonas termoclimáticas con características propias, y con umbrales de riesgo específicos para cada zona termoclimática, lo que permite establecer actuaciones adaptadas a las necesidades locales.

Asimismo, el pronóstico de temperatura es para tres días consecutivos, frente a los cinco días que ofrece el Plan Nacional del Ministerio, y la información está disponible y actualizada diariamente en www.san.gva.es y www.sp.san.gva.es/calor. Al respecto, Millán ha señalado que la predicción climática "cada vez es más difícil" porque "los modelos están cambiando" pero que sí que resulta más fiables a corto plazo.

Cervera ha explicado que todos los días se elaboran mapas de riesgo que muestran los niveles de intervención para cada zona según los datos de temperatura. Así, cada uno de los niveles (verde, amarillo, naranja y rojo) lleva asociadas una serie de actuaciones en salud pública.

Así, se entrará en niveles de riesgo climatológicos cuando las predicciones sean del mismo nivel en dos días consecutivos, mientras que una única jornada implicará sólo un estado de alerta para atender a la posible concreción del exceso de temperaturas. No obstante, Salud Pública podrá incrementar los niveles de riesgo previstos por sistema de vigilancia meteorológico, si la información sanitaria así lo aconseja.

Además, se informará a los ciudadanos de las recomendaciones ante una ola de calor a través de 38.000 folletos y cerca de 1.700 carteles distribuidos en centros sanitarios, así como en la web de la conselleria de Sanitat y el portal sanitario www.cuidatecv.es.

Golpe de calor

El golpe de calor es un cuadro médico grave que se produce cuando el cuerpo no es capaz de regular su propia temperatura. Los efectos que puede provocar son deshidratación, insolación, cefalea, fatiga, calambres musculares, náuseas, taquicardia, ahogo y pérdida de consciencia, coma e, incluso, la muerte.

Ante las temperaturas elevadas, los grupos de riesgo a los que hay que prestar especial atención son las personas mayores, que son más vulnerables, ya que sus sistemas de termorregulación son menos eficientes y pueden presentar dependencia física; las personas con enfermedades crónicas (diabetes, insuficiencia cardíaca, respiratoria, renal, hepática,), que pueden descompensar su situación clínica y empeorar súbitamente por el calor; los niños, las personas con movilidad reducida o con obesidad, los deportistas y las personas que realizan trabajos o esfuerzos físicos importantes soportando altas temperaturas.