El escritor zaragozano Joaquín Berges ofrece "un medicamento" para la felicidad a través de Luis, el personaje de su última novela, 'Vive como puedas' (Tusquets), quien todo lo que hace es en busca de alcanzar este grado emocional.

En este sentido, Berges, en una entrevista concedida a Europa Press, ha afirmado que "la novela está enfocada como una medicina para hacer reír" como demuestra el hecho de que el índice de la misma se presente como el prospecto de un medicamento, con su principio activo, posología, precauciones, contraindicaciones o medidas en casos de sobredosis.

'Vive como puedas', inspirada en la comedia de Frank Capra 'Vive como quieras', que recoge la filosofía ideal, es decir, "vivir como uno quiere", refleja "realmente que en la actualidad sólo podemos plantearnos vivir como podamos, porque lo otro es complicado", reconoce el autor 'El club de los estrellados', que ha presentado su obra este martes en Sevilla.

En esta línea, señala que se trata de una filosofía de vida a la que nos lleva "nuestras múltiples obligaciones y los compromisos a los que nos apuntamos, familiares, laborales y de otro tipo". Además, detrás del guiño a Capra, se esconde "una novela deliciosa, fresca y de la que se puede aprender mucho, pues los personajes viven como quieren, renuncia a sus obligaciones laborales y hacen lo que les gusta en busca de la felicidad".

No obstante, Luis, el personaje principal, y otros compañeros se chocan con una familia de banqueros "porque no disfrutan con lo que hacen". En este contexto, Berges ha señalado que este "choque de trenes" entre "obligaciones y deseos" es interesante y se repite en Luis, un ingeniero en una industria eólica, que quiere ser guionista de comedias, esto es, "de nuevo se enfrentan la obligación y la devoción".

Una rueda de bicicleta

El escritor aragonés reconoce que le ha interesado empapar la novela de la capacidad de Capra para unir lo emotivo, cómico y reflexivo, "tres ángulos para mirar una obra". La escritura de la obra, según ha explicado, ha sido "un ejercicio de acumulación donde la novela tiene una estructura de rueda de bicicleta, donde los radios son las tramas narrativas, que siempre corresponden a problemas y que pasan por el centro, Luis".

"No es normal que a una persona le pasen tantas cosas, aunque sean normales", reconoce el escritor, que aclara que lo que realmente ha realizado con el personaje es someterlo a un test de filosofía vital "muy duro, que no pasaría ni el propio James Bond", bromea.

"El personaje tiene cosas del escritor, pero también el autor se ha contagiado de rasgos de Luis", ha señalado. "He tenido que ser Luis para contar sus cosas en el diario, y éste le ha contagiado cosas suyas porque es una entidad con personalidad propia".

Asimismo, ha reiterado que ha sufrido un ejercicio de catarsis, pues "cuando un escritor crea un personaje que no tiene vida real, pero si virtual, se siente un pequeño Dios en zapatillas, pues le tienes que poner nombre, cara y personalidad".

En estos ejercicios creativos, los novelistas originan un mundo virtual, pero que tienen que tener un carácter "verosímil". "El mundo virtual tiene que ser una mentira creíble y coherente, siendo la naturaleza y la dificultad de la literatura éstas, las mentiras creíbles", expresa.

El escritor Joaquín Berges ha señalado que cuando la redacción de una novela gira en torno a un personaje es "más peligrosa", puesto que si "el peso de la trama se reparte por un mayor número de personajes la redacción es más fácil y conservadora, sobre todo, porque si uno hace aguas la trama sobrevive". "Si un personaje como Luis se hunde, se hunde la novela entera", resalta.