La policía francesa impidió hoy a un centenar de indignados montar en la parisiense plaza de la Bastilla un campamento con el que el movimiento "Democracia Real Ya" de la capital gala pretendía recoger el testigo de la madrileña Puerta del Sol.

"Han desmontado las tiendas cuando intentábamos montarlas y ahora estamos rodeados por varias decenas de agentes", aseguró un portavoz del grupo. Los manifestantes, que habían convocado una asamblea general, protagonizaron posteriormente una sentada pacífica.

Miembros de la comisión jurídica trataron de explicar a los policías los motivos de sus reivindicaciones, pero los agentes les pidieron que se disolvieran pacíficamente. Con esta manifestación, los "indignados" de París querían retomar el pulso de las protestas después de que sus actividades fueran disueltas con gases lacrimógenos el pasado 29 de mayo.

Desde entonces, la vigilancia policial había impedido que se reagruparan en la plaza de la Bastilla, que se había convertido en el lugar habitual de sus reuniones. El grupo, que ha permanecido muy activo durante toda la semana con el reparto de propaganda y varias caceroladas, se reunía en lugares aledaños, hasta que hoy trataron de instalar su campamento.