La Universidad de León (ULE) y el Ente Regional de la Energía (EREN) han elaborado el Plan de Movilidad de la ULE, cuyas directrices y medidas de actuación para acometer en el plazo de cuatro años supondrán una reducción del uso del vehículo del 53 por ciento actual hasta el 40 por ciento y un incremento del transporte en bicicleta hasta alcanzar el nueve por ciento.

El Plan de Movilidad pretende cumplir, entre otros aspectos, con los objetivos de sostenibilidad marcados por la propia Universidad en su Programa de Sostenibilidad y Calidad Ambiental, avalado por los organismos oficiales, tanto nacional como autonómico.

El proyecto, preparado por la empresa Steer Davies Gleave, aborda un análisis y diagnóstico de la movilidad en la Universidad de León en interacción con los territorios municipales en los que se encuentran ubicados sus dos campus de León y Ponferrada, así como con los que están relacionados por motivos de proximidad y de estrategia de los transportes públicos.

Entre los indicadores que se desprenden del estudio destaca el hecho de que el personal de la comunicad universitaria supone un porcentaje "significativo" del total de movimientos diarios, por lo que una adecuada planificación de los medios y sistemas de desplazamiento podrían suponer un importante ahorro energético para toda la sociedad.

El Plan ha sido presentado este viernes por el rector de la ULE, José Ángel Hermida; la vicerrectora de Campus, María Victoria Seco; el delegado del rector para el Programa de Sostenibilidad y Calidad Ambiental de la ULE, Estanislao de Luis Calabuig y Nati Armendia, representante de la empresa encargada del estudio.

Estanislao de Luis Calabuig concretó que en la actualidad y según los datos de seguimiento extraídos, el uso del coche supone un 53 por ciento del total de medios de transporte mientras que el de la bicicleta es del seis por ciento.

En este sentido, explicó que la ULE pretende que a través de diversas medidas de actuación y en colaboración con otras administraciones colindantes se reduzca de manera gradual la utilización del vehículo hasta alcanzar el 40 por ciento en 2015 e incrementar el uso de la bicicleta hasta el nueve por ciento.

Optimizar el gasto energético

En el análisis de todas las potencialidades de transporte y el diseño de su optimización se presenta una serie de indicadores "clave" para optimizar el gasto energético y reducir los impactos medioambientales.

En esta línea, se consideran conjuntamente todas las iniciativas, desde el plan director de la bicicleta ya iniciado hace dos años desde la Oficina Verde de la ULE hasta la creación de la aplicación para compartir coche o un uso más eficiente de cualquiera de los transportes públicos urbanos.

A partir de este momento, el plan requerirá su implantación y seguimiento, con la finalidad de hacer una valoración energética continuada, y establecer las pautas de ajuste adecuadas para cumplir los objetivos de eficiencia y calidad ambiental.

Desplazamiento de 14.000 PERSONAS

Todas las iniciativas se desarrollarán en colaboración con los planes municipales para conseguir la prolongación y el complemento adecuados a la movilidad de 14.000 personas que se desplazan a diario hasta o desde los diferentes campus y edificios de la ULE.

Una de las apuestas de la Universidad dentro del programa de Sostenibilidad Ambiental ha sido la apertura del servicio de préstamo de bicicletas hace dos años, momento desde el cual se ha multiplicado por diez el registro de usuarios y ha generado una habilitación de 400 plazas de aparcamiento.

En este contexto, María Victoria Seco señaló que la Institución estudia la posibilidad de crear dos grandes zonas de aparcamiento de bicis con video-vigilancia para evitar los robos.

Por otra parte, Calabuig también expresó la intención de la ULE de establecer contacto con los ayuntamientos de León, San Andrés del Rabanedo y Villaquilambre para que los préstamos de bicicletas sean compartidos por los citados municipios.