La consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, ha defendido que, con la reforma de la negociación colectiva que aprobará el consejo de Ministros este viernes, "la negociación en cada empresa y lugar de trabajo, va a quedar reforzada" y ha subrayado que el diálogo social "goza de muy buena salud" en Euskadi.

Zabaleta ha realizado estas declaraciones en el pleno de control que se está celebrando en el Parlamento vasco, en respuesta a una pregunta del parlamentario de EB, Mikel Arana, sobre las reformas laborales para incrementar la productividad en Euskadi.

La titular de Empleo ha hecho referencia al decreto que aprobará este viernes por el Gobierno central tras la ruptura de conversaciones entre patronal y sindicatos para llevar a cabo una reforma laboral. Zabaleta ha afirmado que se trata de un punto de partida porque tendrá un recorrido parlamentario en el que se tendrán que posicionarse los grupos del Congreso de diputados.

Por otro lado ha defendido que la competitividad de las empresas es una "cuestión de país" que "no sólo compete a empresarios y sindicatos sino que afecta a todas las administraciones", y ha subrayado que en el ámbito sociolaboral, "promover la mayor competitividad de las empresas pasa por una mayor participación de los trabajadores en las empresas y por enriquecer la negociación colectiva".

Asimismo, ha resaltado que "enriquecer" la negociación colectiva pasa "no sólo por hablar de jornada y salario, sino por las mejoras en la calidad de vida en el trabajo". "Esto sólo se puede hacer a través del diálogo social y del acuerdo entre los agentes sociales", ha indicado.

Negociación reforzada

Por ello, ha insistido en que "más allá de que el marco legislativo regule cuál es el valor que debe tener la negociación colectiva por sector territorial o en otros ámbitos, el valor fundamental es la negociación en cada empresa y lugar de trabajo, lo que va a quedar reforzada en la negociación colectiva que se apruebe en el Congreso de los diputados".

Zabaleta ha defendido que "la productividad hay que vincularla con el coste laboral, no sólo con el coste salarial, porque sería un argumento simple y barato". Asimismo, ha insistido en que "a menores costes laborales, que no salariales, hay más productividad y más competitividad, por eso este asunto no es tan sencillo".

En este sentido, ha defendido que el avance "fundamental" es "el diálogo social y entre los agentes". "El camino es dejar que los agentes sociales lleguen a la mayor cantidad de acuerdos", ha indicado.

Sin embargo, ha recordado que aunque el Gobierno vasco no tiene competencias en estos aspectos, el Ejecutivo vasco "impulsa el diálogo social en el País vasco, entre los que se quieren sentar en la mesa, porque son quienes están concernidos a avanzar en estas materia en Euskadi". "El diálogo social en Euskadi goza de muy buena salud", ha zanjado.

Derechos de trabajadores

Arana, por su parte, ha defendido que el "problema" radica en que este tipo de reformas "modifican la estructura de negociación lo que provoca que al final todo se lleve a al empresa y vaya en detrimento de los derechos de los trabajadores".

Para Arana, esta situación "confunde productividad de empresas con bajar salarios" y al llevar la negociación provincial a la empresarial, "un porcentaje alto de empresas con menos de seis trabajadores, no tiene derecho a delegado sindical, lo que desvirtúa una parte importante de la protección de los trabajadores y se les obliga a negociar uno a uno sus condiciones laborales dentro de la empresa".

Finalmente, ha afirmado que "está demostrado por el Eustat que los trabajadores ya pierden poder adquisitivo con la estructura actual de negociación colectiva en la que el incremento del so salarios está por debajo del IPC". "Con estas reformas se consolida un modelo en el que se socializan las pérdidas y se privatizan los beneficios", ha criticado.