El sector de la metalurgia en Galicia factura más de 17.000 millones de euros al año y emplea a casi 70.000 personas, lo que supone una cuarta parte del PIB industrial.

Estos datos los ha aportado este viernes el conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas en la apertura del congreso de Estruturas Metálicas organizado por la Asociación de Industriais Metalúrxicos de Galicia (Asime) en Santiago, en donde ha remarcado que esta asociación cuenta con más de 1.000 empresas adheridas, que representan el 90 por ciento del empleo y facturación del sector.

Asimismo, ha destacado que las 32 puentes metálicas y mixtas que se incluyen en la red autonómica de carreteras consiguen una elevada puntuación en las inspecciones de ingenieros especializados en su mantenimiento. Para ello, la Xunta dispone de dos programas de supervisión, el sistema ordinario de vigilancia a través de los departamentos territoriales y el modo de inspección específico para obras de paso.

En esta línea, ha subrayado que los profesionales que se dedican al diseño y construcción de estructuras metálicas tienen como normas fundamentales la seguridad estructural, la seguridad frente al fuego, así como la higiene, la salud y el medio ambiente. Esta normativa, que hasta ahora estaba limitada al ámbito de la edificación, se amplía en la actualidad a la ingeniería civil.

Posibilidades de diseño

Además, el conselleiro ha señalado que los arquitectos e ingenieros encuentran en las estructuras metálicas posibilidades de diseño inigualables, y puso como ejemplo el puente del Eje Atlántico de alta velocidad sobre el río Ulla, así como el puente sobre el río Miño en Cortegada, cuya estructura metálica permitió un tablero ligero que posibilite transportar el tramo central por el río mediante flotación.

Asimismo, el responsable de Medio Ambiente hizo hincapié en que la reutilización y el reciclaje de materias primas es una cuestión prioritaria en la construcción tanto civil como en edificación.

Junto a lo que ha concluido valorando la "excelente" formación de los talleres gallegos, que producen elementos estructurales que sobrepasaron los límites territoriales, en una mezcla de saber tradicional y última tecnología.