El portavoz parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, ha opinado este jueves que la entrada de inversores privados en Novacaixagalicia (NCG) supone, en la práctica, la "privatización" de esta entidad, al tiempo que ha subrayado que el principio de "galleguidad" no se consigue con capital privado "de origen gallego", sino con que la ciudanía gallega pueda "controlar" la entidad a través de sus instituciones.

En declaraciones a Europa Press, preguntado sobre la operación liderada por José María Castellano para entrar en el capital de NCG Banco, el nacionalista ha recordado que el exvicepresidente de Inditex "formó parte de ese grupo" que "impidió que capitales gallegos pudiesen retomar el control de Unión Fenosa" en el momento de su venta por parte del Banco Santander. "Por lo tanto, garantías pocas", ha resuelto.

Al hilo de ello, ha precisado que la "galleguidad" que su formación demanda para NCG "no es sólo que el capital sea de origen gallego o vinculado con Galicia", sino que se basa en que "el conjunto de los gallegos, a través de sus instituciones representantivas, puedan tener un control estratégico de la nueva caja". Así, a su juicio, "el negocio, la inversión, la política crediticia y la obra social" podrían ser "orientadas" en función del "interés general".

En este sentido, Aymerich ha incidido en que no existe "ningún tipo de garantía" de que NCG vaya a mantener su "vinculación con Galicia", dado que los inversores "pueden, en cualquier momento, vender en el mercado su participación". De igual forma, una parte del banco "puede cotizar en los mercados bursátiles", según ha explicado.

Finalmente, el diputado del Bloque se ha mostrado muy crítico con todo el proceso que ha derivado en "la privatización de un patrimonio común de todos los gallegos", como es "su ahorro" y "su caja". "La caja desaparecerá como tal y habrá un banco privado que gestione una parte muy importante del ahorro gallego", ha sentenciado.