El titular del juzgado de lo Penal número 10 de Valencia ha condenado a un hombre, interno en el centro penitenciario de Picassent, a cumplir tres años de prisión por agredir a dos funcionarios que intentaban que abandonase el patio en el que se encontraba, según ha informado la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) en un comunicado.

El condenado aceptó los hechos que se le imputaban y su letrado llegó a un acuerdo con el ministerio fiscal antes de celebrarse el juicio por el que cumplirá tres años de cárcel por un delito de atentado a funcionario público en el ejercicio de su cargo; otro de lesiones; y una falta de lesiones.

Además, el hombre, para el que el juez ya ha confirmado la pena, tendrá que indemnizar a los funcionarios agredidos con un importe de 11.600 euros en concepto de responsabilidad civil. Sin embargo, al respecto, Acaip ha lamentado que es más probable que los afectados no lleguen a cobrar esta indemnización ya que los internos siempre se declaran insolventes.

El incidente tuvo lugar el 9 de noviembre de 2008 en el módulo 5 del establecimiento penitenciario. Según recoge como hechos probados la sentencia, el interno se negó a abandonar el patio y les dijo a los funcionarios de servicio que tendrían que entrar los GEOS a por él. A la vez, se apropió de una silla y de una barra de mancuernas metálicas que había cogido del gimnasio.

Cuando llegó el jefe de Servicios —máxima autoridad en el interior de un centro penitenciario en ausencia del director— para que depusiera su actitud, se abalanzó sobre él golpeándole con una pesa que tenía en la mano.

Como consecuencia de esta agresión, sufrió lesiones que consistían en herida incisa en zona frontal de unos 4 cm que motivó baja médica y secuelas de una cicatriz de 2,5 cm en la frente. Asimismo, le supuso trastorno neurótico por estrés postraumático. Otro funcionario sufrió también contusiones en las manos y herida incisa de 1 cm en un dedo.

Desde Acaip han valorado esta condena porque "se reconoce el carácter de agente de la autoridad de los funcionarios de Instituciones Penitenciarias en el ejercicio de sus funciones". Asimismo, ha mostrado su deseo de que esta resolución "acabe con la sensación de impunidad que en muchas ocasiones tienen los internos, los cuales perciben que las agresiones a funcionarios les salen gratis". Esa sensación es, entre otras cosas, "la que provoca un aumento en el número de agresiones a funcionarios de Instituciones Penitenciarias", han comentado.