El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, ha anunciado que le va a pedir al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, en el marco de la sesión de control al Ejecutivo del Parlamento andaluz, que se celebrará este jueves, que parte de las ayudas que Andalucía reciba por la denominada 'crisis del pepino' vaya a parar a los jornaleros.

En rueda de prensa, tras mantener una reunión con los líderes sindicales de UGT-A y CCOO-A, Manuel Pastrana y Francisco Carbonero, respectivamente, Valderas ha considerado que si hay que destinar ayudas para los empresarios, también éstas tienen que ir dirigidas a la pérdida del empleo y los jornales. "Es así de justo y no habrá ningún empresario ni emprendedor que no tenga esto en cuenta", ha añadido.

En esta línea, el líder de IULV-CA ha considerado "muy injusto" que se esté perdiendo la perspectiva del empleo en este asunto, añadiendo que tanto el Gobierno de la Nación como la Junta están "obligados" a responder ante el sector hortofrutícola "tanto globalmente como a cada una de las partes". Además, ha considerado que los 150 millones que Bruselas ha propuesto para los agricultores afectados es "muy poca cantidad" y que está "lejos" del daño causado.

Achaca parte de la responsabilidad al pp

De otro lado, ha apuntado que los 'populares' siempre intentan "irse de rositas", pero que en este asunto no van a poder hacerlo. Y es que, según ha destacado, "en Europa mandan los del PP y el gobierno alemán es 'popular' y comparte la política neoliberal de Rajoy", ha señalado Valderas.

Asimismo, ha exigido al PP que sea "más responsable" en esta situación, lamentando que lo único que ha hecho sea "criticar". "Si no hay una respuesta clara y justa desde Europa, que en ningún caso son los 150 millones ofrecidos, será porque los 'populares' europeos no la han reclamado", ha apostillado.

Finalmente, ha subrayado que, aunque haya habido un "defecto de gestión y rapidez" por parte del Gobierno de España en la 'crisis del pepino', los 'populares' también serán "responsables" de este daño causado al sector hortofrutícola por "no exigir el máximo a su gente".