En declaraciones a Europa Press, el presidente de la FAL, Juan Manuel Cruz, se ha mostrado confiado en que serán "muy pocos" los centros de Secundaria que opten por el formato digital. "Ojalá no nos equivoquemos, pero la sensación que tenemos es de que la mayor parte del profesorado prefiere el libro tradicional y que el papel será la opción mayoritaria", ha explicado. De no ser así, Cruz advierte de que las librerías lo tendrán "todo perdido" porque el "negocio" lo harán directamente las editoriales o distribuidoras a las que los centros encargarán estos libros de texto digitales.

Pese a ello, Cruz dice que lo que "más" le preocupa es no saber por qué la Consejería de Educación ha tomado esta decisión, ya que, según ha indicado, no existen informes o documentos que avalen el éxito de los libros en formato digital utilizados de forma experimental durante el curso pasado en 82 centros. "Creo que se está perdiendo un poco el norte y no sabemos qué datos tiene la Consejería de los centros pilotos como para recomendar de esta forma masiva la utilización de lo digital", ha expuesto.

Se refiere así el presidente de la FAL a la invitación que la Administración educativa ha hecho a los centros, a través de unas instrucciones de la Dirección General de Participación e Innovación, para que se decanten por esta nueva modalidad. En concreto, estas instrucciones dicen: "En primer curso de la ESO se recomienda seleccionar el libro en soporte digital para todo el alumnado, con objeto de continuar con los libros en este soporte para el siguiente curso 2012-2013, llevando así una implantación progresiva por curso de estos libros en soporte digital en toda la etapa educativa".

Detrás de esta invitación a los centros, Cruz considera que está la concepción generalizada de que "lo digital es más barato", algo que, en su opinión, es "solo una parte de la verdad" porque para implantar el libro digital "primero hacen falta ordenadores en los centros y eso sí que cuesta dinero".

En esta misma línea, el representante de los libreros andaluces ha lamentado que la argumentación de la Consejería de Educación en torno a los libros de texto sea siempre, "y por encima de todo, el de la gratuidad". "Nosotros somos leales colaboradores del programa de gratuidad, pero entendemos que no es un sistema justo porque la justicia está en el reparto de libros gratis a quien más lo necesita, no en el reparto igual para todos", ha explicado.

Con todo, Cruz ha indicado que una de las cosas que "peor llevan" los libreros es que, desde la Administración, se tomen otras medidas como las de "casi prohibir" que colegios y profesores recomienden a sus alumnos la compra de determinado material complementario impreso, como los cuadernillos de apoyo o refuerzo. Aún admitiendo que hay centros escolares que se "pasan veinte pueblos" con estos cuadernos y contra los que se debería actuar, el presidente de la FAL reclama más comprensión por parte de la Administración educativa en este asunto. "Siempre que lo discutimos no encontramos ningún tipo de acercamiento por parte de la Consejería, que solo se basa en el discurso de la gratuidad y en que, por lo tanto, no se puede comprar nada... ¡cómo si el resto de las cosas, como los uniformes, no costaran dinero"!, se queja.

A juicio de Cruz, con esta actitud el único mensaje que logra transmitir la Administración educativa es el "equivocado, el de estar contra los libros cuando éstos han sido y son la salvaguarda del conocimiento y de la cultura". En este sentido, ha lamentado que "la evidente falta de comprensión lectora y matemática" de los escolares andaluces no sirva "para hacer reflexionar a los dirigentes políticos sobre qué estamos haciendo mal en educación".