El secretario nacional de la FGAMT de la CIG, Xosé Fernández Piñeiro, ha urgido este martes al Igape a "concretar el tema del Consorcio", en alusión a las tramitaciones relativas a la oferta de adquisición de las plantas de Ribadumia y Vilaxoán así como de la marca Miau —oferta que cuenta con el apoyo de la Xunta—.

En declaraciones a los medios ante la puerta de los juzgados de Vigo, donde Piñeiro estaba citado por un juicio de faltas, Fernández Piñeiro ha recordado que ya está listo el "informe definitivo" sobre el concurso de acreedores de la conservera y ha esperado que la cuestión sobre la oferta del Consorcio quede concluida "en poco tiempo" y que así las plantillas de Vilaxoán, Ribadumia y O Grove puedan volver al trabajo —actualmente están en un ERE extintivo—.

Sobre los extrabajadores de Vigo —que están pendientes de cobrar las indemnizaciones—, explicó que se está "tratando de gestionar lo mejor posible" el patrimonio y el suelo, ante la posibilidad de que haya ofertas de suelo.

En este punto, ha explicado que, según ha sabido de forma oficiosa, "puede haber una oferta" sobre la parcela en la que se ubica la planta de Vigo, pero que todavía no se ha concretado.

IGAPE

Sobre la situación del Igape, ha afirmado que es "mentira" que el organismo siga trabajando ahora —una vez que el director y otro alto cargo se mantienen apartados del organismo a raíz de la 'Operación Campeón'— con la misma intensidad que antes.

En este sentido, ha estimado que, si existen demoras fruto de la paralización, el Consorcio podría incluso "mandar esto —el proyecto para Alfageme— a paseo" ya que, según destaca, "cada día que pasa con la marca fuera del mercado no es positivo".

No obstante, ha confiado en que la tramitación "quede concluida en poco tiempo" y, de hecho, ha manifestado su esperanza en que "a finales de este mes" haya una "concreción del Consorcio" e incluso "posibles ofertas sobre el suelo de Vigo".

Juicio de faltas

Piñeiro acudió este martes a los juzgados por el altercado ocurrido en abril del año pasado en la planta de Alfageme en Vigo, con motivo del traslado de unos pagarés de la conservera a Promalar —empresa de la familia Lago, propietaria de Alfageme—.

El altercado se produjo cuando la secretaria iba a llevar los pagarés de Alfageme a la promotora, hecho que intentaron evitar los trabajadores, quienes tenían salarios pendientes de cobro. A raíz del incidente ocurrido, hubo un cruce de denuncias entre los supuestos implicados, por cuestiones como insultos o agresiones.

Finalmente, todas las partes que comparecieron en el juicio de este martes —los vigilantes de seguridad, una secretaria que era la que iba a trasladar los pagarés, otras dos trabajadoras y Piñeiro— han quedado absueltas al no haber presentado acusación en el momento del juicio de faltas, en el que Piñeiro estaba inicialmente denunciado por insultos, amenazas y coacciones.

Según ha explicado el abogado del sindicalista de la CIG, Gustavo García, al no haber comparecido "el empresario" —en alusión a Gustavo Lago, que era gerente de la conservera y había denunciado al sindicalista—, al ser éste el "principal acusador"; el resto de personas decidió retirar las acusaciones.

Sobre los hechos, el letrado ha explicado que Piñeiro había intentado "mediar" en el conflicto ocurrido ya que se quería evitar que los pagarés —por valor de 200.000 euros— saliesen de la empresa conservera, teniendo en cuenta que los empleados tenían nóminas pendientes de cobro.

Asimismo, ha recordado que pocos días después de este incidente la conservera entró en concurso de acreedores y que, tiempo después, un auto obligó a Promalar a reintegrar 11 millones de euros a Alfageme.

Con motivo del juicio de este martes, celebrado en Instrucción número 8, extrabajadores de la conservera —en su mayoría de la planta de Vigo— han mantenido una concentración de apoyo ante las puertas del edificio de juzgados.