El futuro alcalde de Santiago de Compostela, Gerardo Conde Roa, se ha reafirmado este miércoles en que los 'indignados' de la Plaza del Obradoiro constituyen "un campamento ilegal de okupas" y ha vuelto a exigir al regidor en funciones, Xosé Sánchez Bugallo, y al delegado del Gobierno en Galicia, Miguel Cortizo, que se les desaloje "cuanto antes".

"Es un campamento ilegal de ocupas, con c o con k, el significado es el mismo", ha insistido Conde Roa en una rueda de prensa celebrada en el Pazo de Raxoi, donde ha insistido en que la "ocupación ilegal" de esta plaza compostelana "debe acabarse". Al tiempo, ha señalado que es a Bugallo y a Cortizo a quienes corresponde hacerlo, dándose, además, "la circunstancia feliz" de que ambos pertenecen al mismo partido, el PSOE.

"Y que lo hagan cuanto antes porque Santiago no puede estar en esta situación", ha continuado, tras ratificar que él mantiene "su criterio" de que los 'indignados' están "ocupando ilegalmente" una plaza pública. Al respecto, ha recordado que "la ley" determina que esto sólo puede hacerse "con autorización o mediante una concesión", y que no se dan "ninguna de las dos" circunstancias.

"Imagínense que a mí se me ocurre poner una tienda de campaña en la Plaza de Platerías, imagínense el tiempo que tardaría la Policía municipal en venir a decirme que eso no es posible. Bueno, pues yo no entiendo cómo es posible para unos y para otros no", ha argumentado.

"doble juego" de bugallo

Acompañado de la también dirigente popular Paula Prado, Gerardo Conde Roa ha subrayado que él, si bien fue "el primero" en pedir su desalojo, no ha sido el único, sino que también lo hizo el propio Bugallo.

Eso sí, ha criticado que éste haya matizado su postura posteriormente y ha manifestado su convicción de que el "doble juego permanente" del todavía regidor compostelano es, precisamente, el que los vecinos "castigaron en las urnas" el pasado 22 de mayo.