El Partido Popular de Mijas (Málaga) ha anunciado este martes que realizará una auditoría económica y de gestión en el Ayuntamiento del municipio, con el objetivo de conocer la situación real de la deuda municipal y del volumen de facturas sin fiscalizar.

Según han señalado en rueda de prensa el concejal electo Mario Bravo y el vicesecretario de Economía de la Ejecutiva del PP de Mijas, Jorge Soler, los propios funcionarios municipales serán los encargados de llevar a cabo la auditoría, para así "ahorrar costes" y sobre los que vierten "su absoluta confianza en su profesionalidad y capacidad técnica".

Según los datos de los que dispone el PP mijeño, el Ayuntamiento adeuda 39 millones de euros a proveedores y 30 millones a entidades financieras, "deuda que supone casi el presupuesto anual del Ayuntamiento o 1.000 euros por cada habitante", han señalado, de forma que el plan de mejora de la economía municipal hecho público por los 'populares' consiste en reducir los gastos corrientes y mejorar los sistemas de recaudación.

Bravo ha mostrado su preocupación por "la velocidad en que se ha incrementado el déficit municipal", que, ha dicho, "se había disparado en 20 millones de euros en los últimos años". Así, "de cada cuatro euros que gastamos, sólo ingresamos tres", ha aseverado.

Según el concejal electo, la situación requiere "un equilibrio de las cuentas", que, según ha declarado, los 'populares' mijeños pretenden alcanzar tanto por la vía de la reducción de gastos como por el incremento en la eficacia de la recaudación. MEDIDAS

De esta forma, Bravo ha anunciado medidas como una congelación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para los empadronados, "porque no se pueden desperdiciar los ingresos que el Estado debería entregarnos por las 40.000 o 50.000 personas no empadronadas, pero que viven en Mijas durante todo el año y que requieren de servicios públicos".

De esta forma, el Partido Popular de Mijas, que logró la mayoría absoluta de los concejales en las elecciones del pasado 22 de mayo, prevé un incremento del número oficial de residentes en el municipio. "Y cuando decimos que congelaremos el IBI lo decimos de verdad, no como sucedía hasta ahora", ha apuntado el concejal electo.

También contemplan la mejora de los sistemas informáticos de las tres oficinas de recaudación del municipio, "para que no vuelva a suceder que un vecino va a pagar sus impuestos y se tiene que volver sin poder pagarlos", así como solventar los problemas de notificación existentes.

Para ello, Bravo ha indicado que, "junto con la concejalía de Vía Pública, vamos a nombrar y numerar todas las calles y casas", con el objetivo de "que los notificadores del Ayuntamiento puedan notificar las deudas tributarias con el Consistorio".

En este sentido, ha criticado que "la gestión de recaudación del Ayuntamiento de Mijas funciona mal, pero no por culpa de los funcionarios, sino porque carece de una dirección por objetivos clara y bien dirigida", ha explicado.