Uno de cada dos vascos piensa que los demás no son de fiar, porcentaje que sube hasta el 70% en jóvenes y parados

Uno de cada dos vascos piensa que los demás no son de fiar, porcentaje que sube hasta el 70 por ciento en el caso de los jóvenes y los desempleados, según el IV Estudio ARAG, compañía aseguradora especializada en seguros de defensa jurídica y servicios legales.

Uno de cada dos vascos piensa que los demás no son de fiar, porcentaje que sube hasta el 70 por ciento en el caso de los jóvenes y los desempleados, según el IV Estudio ARAG, compañía aseguradora especializada en seguros de defensa jurídica y servicios legales.

Según esta encuesta, un 49 por ciento piensa que el resto de personas "no son de fiar y que es mejor no confiar en los demás porque pueden engañarte" y "la crisis ha sido un detonante de esta tendencia, pues sólo un 2 por ciento confía más ahora en las personas de su entorno que cuando empezó la crisis".

Según los responsables de esta encuesta, uno de los principales indicadores que corroboran esa relación entre la crisis y la pérdida de confianza es que las personas más afectadas por la crisis, como los desempleados o los jóvenes, presentan un índice de desconfianza mayor que la media. Así, un 70 por ciento de los jóvenes está convencido de que el resto de personas no son dignas de confianza y el 70 por ciento de los parados cree que la gente no confía en los otros.

Por otro lado, el 48 por ciento de los encuestados vascos reconoce que ha sido engañado en el último año. Aunque el mayor número de desengaños de los vascos ha procedido de personas ajenas a su entorno más personal, destaca que en un 17,4 por ciento de los casos es la propia familia, la pareja o los amigos quienes han traicionado su confianza. Estos niveles se sitúan, en cualquier caso, por debajo de la media española (21,3%).

Pese al clima de desconfianza imperante, los vascos no pierden el optimismo y se vuelcan en las buenas causas, pues el 84 por ciento confía en los proyectos solidarios de los que no espera nada a cambio.

Por otro lado, si se trata de confiar en ciudadanos de otras comunidades autónomas, los catalanes son quienes más simpatías despiertan entre los vascos. Así, para un 40 por ciento de la población de Euskadi, los catalanes son las personas más dignas de su confianza, muy por delante de la media de España. Esta confianza es recíproca, porque en Cataluña la mayoría confían en vascos por encima de otros ciudadanos (36%).

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