El portavoz del grupo socialista en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, ha calificado este lunes de "normal" el inicio de la campaña para recoger los avales suficientes por parte del profesor de la Universidad de Sevilla, doctor en Filosofía y miembro del comité de empresa de la Hispalense por UGT José Carlos Carmona, con el fin de suceder a José Luis Rodríguez Zapatero, así como que un militante quiera lanzar "un brindis al sol" de esa manera.

En rueda de prensa en Huelva, Jiménez ha indicado que las elecciones primarias es "un proceso abierto y democrático" en el que todos los militantes pueden ser elegidos y electores, por lo que ha insistido en que "está dentro de la normalidad que algún militante quiera lanzar un brindis al sol de esta manera".

No obstante, ha dejado claro que "claramente la inmensa mayoría del partido tiene la cabeza puesta en el sentido común y en el interés general para que este proceso permita fortalecer el partido y respaldar mayoritariamente a la opción potente y fuerte que significa Alfredo Pérez Rubalcaba".

En este sentido, ha incidido en que el reglamento y el procedimiento "están muy claros y hace falta reunir miles de avales y someterse al voto", por lo que "objetivamente" cree que "hay muchas dificultades de que pueda producirse", refiriéndose a la posible presentación de José Carlos Carmona.

Por su parte, Carmona ha asegurado que una de las razones que le llevó a iniciar una campaña para recoger los avales suficientes fue la retirada de la ministra de Defensa, Carme Chacón, porque "se desoía otra vez más la petición de la sociedad".

"Cuando vimos que Carme Chacón no se presentó, que desistió, vimos que la maquinaria desoía, otra vez más, la petición de la sociedad que estaba pidiendo que se viera que somos humanos, democráticos, discutir, hablar de ideas al proponer nueva gente y, además, una cierta regeneración", ha declarado Carmona este lunes, en una entrevista a Onda Cero, recogida por Europa Press.

Ésta es una de las razones que el doctor en Filosofía esgrime para presentarse a la carrera por la sucesión de José Luis Rodríguez Zapatero, que le enfrentará al vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, en caso de lograr los 22.000 avales necesarios.