El Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Cantabria (STEC) ha mostrado su voluntad de diálogo y negociación "sin ningún tipo de sectarismo" con la nueva Consejería de Educación que surja en la región con el cambio de Gobierno y ha confiado en que por parte de la administración la actitud sea "recíproca".

En un comunicado, STEC, sindicato mayoritario de la enseñanza pública de Cantabria, subraya la importancia de que se genere con la Consejería "un clima de entendimiento que favorezca el mantenimiento y mejora" de la educación pública.

Asimismo, confía en que el nuevo Gobierno cumpla los acuerdos y las medidas que se adopten, y favorezca la atención al alumnado, el mantenimiento y el aumento de plantillas en los centros públicos, la dotación económica necesaria para el óptimo funcionamiento de los centros, la disminución de las ratios, o el aumento y mejora de condiciones para el profesorado y personal docente de las aulas de dos años, entre otras cuestiones.

Igualmente, espera que los proyectos de construcción de nuevos centros educativos sigan su curso normal, así como la planificación de nuevos centros que son "absolutamente imprescindibles".

En este sentido, considera "especialmente grave" la situación de la escolarización en Castro Urdiales, que requiere "urgentemente" un nuevo centro público de Educación Infantil y Primaria. A su juicio, "no sería solución dar más conciertos a ningún centro privado, ni masificar los centros públicos existentes".

STEC también espera que el PP lleve a la práctica la postura que ha mantenido hasta ahora en contra la reducción del sueldo a los empleados públicos. Así, el sindicato pide que no se reduzca el salario y se plantee la "paulatina recuperación del poder adquisitivo perdido".

También confía en que se mantengan las condiciones y beneficios sociales del personal docente, ya que "redundan directamente en la calidad de la educación".

Del mismo modo, el sindicato advierte de que "no sería entendible que, en momentos de dificultad económica, se ampliaran los recursos a la enseñanza privada a costa de la enseñanza pública".

Por último, subraya que la Consejería tendrá su "leal apoyo" en todas aquellas medidas encaminadas a la "mejora y extensión" de la enseñanza pública, pero encontrará también su "oposición y rechazo más rotundo" a "todo lo que suponga una merma de recursos y calidad de la escuela pública".