Agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) han desarticulado una red transnacional que estafaba a ciudadanos extranjeros que compraban tarjetas de residencia falsificadas a 6.000 euros cada una. Se han practicado ocho detenciones en España, una de ellas en Teruel, y cinco en Francia.

La organización buscaba a inmigrantes irregulares en Francia y les ofrecía regularizar su situación mediante la falsificación de diversos documentos, entre ellos certificados de matrimonio.

Hasta el momento se han detectado en España más de 50 solicitudes de tarjetas de residencia presuntamente fraudulentas, siempre tras matrimonios inexistentes entre ciudadanos tunecinos y mujeres francesas.

En la investigación han colaborado el Centro de Cooperación Policial y Aduanera de Le Pertus, la Policía francesa de DDPAF de Haute-Garone, el agregado español de Interior en París y el agregado especial francés en la Comisaría General de Extranjería y Fronteras.

La investigación se inició gracias a los controles que se realizan sobre las solicitudes de residencia como familiar de ciudadano de la Unión, presentadas ante la Subdelegación del Gobierno de Barcelona.

Se detectó un aumento considerable de solicitudes en las que se repetía la nacionalidad del solicitante (Túnez) y de la ciudadana comunitaria (Francia).

Además, en todos los casos alegaban el mismo parentesco, haber contraído matrimonio civil en Francia, y aportaban documentación falsa. Tras ampliar la búsqueda de casos similares se averiguó que en la Subdelegación del Gobierno de Girona también se habían presentado solicitudes de residencia de familiar comunitario en las que se repetían las mismas características.

La red criminal seguía siempre un modus operandi. Buscaban dentro de la comunidad tunecina en las ciudades de Toulouse y Marsella a hombres residentes en Francia de forma irregular.

La organización les ofrecía la posibilidad de obtener en España una tarjeta de residencia como familiar de ciudadano de la Unión, con validez inicial de cinco años y que les permitiría residir y trabajar en España o Francia.

La organización se encargaba de conseguir los datos de la supuesta cónyuge francesa, el alojamiento y los desplazamientos que se tuviesen que hacer en España, todo a cambio de un precio de 6.000 euros.

Los miembros de la organización poseían amplios conocimientos en materia de extranjería, localización y funcionamiento de las oficinas de extranjeros tanto en la Comunidad Autónoma de Cataluña, como en Comunidades limítrofes. Además disponían de un laboratorio donde falsificaban los certificados y documentos necesarios para presentar las solicitudes.

Una vez solicitada la residencia como familiar comunitario, el ciudadano tunecino volvía a Francia, donde permanecía a la espera de la resolución de la solicitud.

Tanto para la verificación de los certificados de los supuestos matrimonios, como para la identificación de otros integrantes de la red, se ha contado con la colaboración de las autoridades galas.

Durante la operación han sido arrestadas dos personas en Teruel, otras dos en Cornellá de Llobregat, también dos en Gerona y dos en Barcelona, así como cinco en las ciudades francesas de Toulouse y Niza.

En los registros efectuados, los agentes se han incautado de una maquina de confección de sellos húmedos de goma; numerosos sellos húmedos de centros oficiales y Ayuntamientos, entre ellos seis de instituciones francesas; 10 pasaportes de Túnez; borradores eléctricos; una lámpara de luz ultravioleta y dos vehículos.

La investigación ha sido desarrollada por agentes de las UCRIF de Barcelona, Girona y Teruel, de la BCRI de Madrid, de los Grupos de Extranjería de Lloret de Mar y de Cornellà de Llobregat, con la colaboración del Centro de Cooperación Policial y Aduanera de Le Pertus, la Policía francesa de DDPAF de Haute-Garone, el agregado español de Interior en París y el agregado especial francés en la Comisaría General de Extranjería y Fronteras.