Al menos 32 personas murieron este viernes en distintos lugares de Siria por las nuevas protestas contra el régimen de Bachar al Asad que estallaron después de las oraciones del mediodía, informaron testigos y activistas de la oposición.

La red de información opositora Flash dijo que al menos 18 personas habían perecido por la acción de las fuerzas de seguridad al reprimir las protestas públicas de este viernes y la cadena emiratí de televisión Al Arabiya, por su parte, situó en 21 los fallecidos en esta jornada.

El régimen de Damasco ha impuesto un férreo control de la información, ha expulsado a varios periodistas extranjeros y ha detenido o prohibido trabajar a reporteros sirios que colaboran para medios internacionales.

Las manifestaciones se extendieron a Damasco, la capital, donde cerca de 2.500 fieles iniciaron una protesta en los alrededores la mezquita de Ali bin Abi Taleb. Otras marchas se llevaron a cabo en las ciudades de Latakia y Banias.

Las protestas, convocadas en el llamado Día de la Libertad, se producen en medio de las manifestaciones que comenzaron a mediados de marzo pasado y que han causado cerca de un millar de muertos, según cálculos de organizaciones de derechos humanos.