Acabar con el estrés infantil. Este es el nuevo objetivo que se ha marcado la Consellería catalana de Enseñanza. La responsable de esta cartera, Irene Rigau, propuso este jueves renovar los horarios escolares para atajar la ansiedad que provoca a los alumnos las largas jornadas de colegio, unidas a las actividades extraescolares, como una medida más para reducir los altos índices de fracaso escolar.

Rigau aseguró que "los niños están bastante estresados" y, para ella, en estas condiciones, "no se les puede pedir mayor rendimiento". Para la consellera, los pequeños necesitan más tiempo para estar con la familia, hablar con los padres, hacer los deberes juntos...

El Departament se reunirá la semana que viene con el Consell Escolar de Catalunya para informarle de la distribución de los días lectivos y festivos para el próximo curso, y de cuándo empezará y acabará.

La consellera también indicó que su objetivo es reducir el fracaso escolar de un 30% a un 15% en las dos próximas legislaturas. Y que esto se conseguirá mejorando la competencia lectora y el nivel de matemáticas de los estudiantes, así como con una mayor implicación familiar.

Con todo, Rigau reconoció que parte del abandono escolar de los últimos años estuvo relacionado con la situación económica: muchos jóvenes dejaron las aulas para trabajar.