Alrededor de 40 personas se han concentrado esta tarde en la Plaza España de Palma sumándose así a la convocatoria de acampadas por parte de 'Democracia real ¡Ya!', realizada a través de Internet, mediante la cual se pretende mostrar el rechazo al actual sistema político y reivindicar una democracia "participativa" en la que los ciudadanos no sólo tengan capacidad de decisión cada cuatro años, sino durante toda la legislatura a través de referéndums y plebiscitos.

Las personas que han participado en la concentración, la mayoría de ellas jóvenes, han realizado una asamblea en la Plaza España, ante una pancarta en la que se podía leer 'Nuestros sueños no caben en las urnas'. Durante la reunión, sólo una decena de jóvenes han mostrado su disposición a acampar en esta plaza, si bien tanto la Policía Nacional, como la Policía Local les ha informado de que esta acción sería ilegal, por lo que, en caso de llevarla a cabo, serían desalojados.

No obstante, varios jóvenes han informado a los agentes de la Policía Local que, al menos, tenían intención de quedarse a dormir con esterillas o cartones y, por tanto, sin tiendas de campaña, algo que, según han recordado, hacen diariamente decenas de personas 'sin techo' sin que nadie les desaloje.

Los agentes han insistido en que podrán quedarse a dormir únicamente en esas condiciones, pero sin ningún tipo de tienda de campaña, ni cartel reivindicativo, teniendo en cuenta que en ningún momento los participantes de este acto han dado aviso a la Delegación del Gobierno sobre su intención de acampar en pleno centro de la capital balear.

Durante la asamblea celebrada en el medio de la Plaza España, uno de los jóvenes ha remarcado que "hay muchas maneras de democracia y la que estamos viviendo no es más que una dictadura", por lo que ha dicho que los políticos "no están tomando el pelo".

Por ello, ha abogado por que los ciudadanos puedan decidir sobre lo que quieren a través de referéndums, al tiempo que ha criticado que "ahora vienen las elecciones y nos quieren seguir vendiendo más de lo mismo y no sólo nos quedamos con un cambio del sistema electoral que sea más representativo y más justo, sino que exigimos responsabilidad política, lo que que implica una Ley que oblique a los políticos a cumplir con sus programas electorales, ya que si esto no sucede, sus promesas quedan en nada".

Por su parte, Eugenia, una profesora de Primaria que se ha sumado a la concentración, ha recalcado que en este acto "no hay organizadores, sino que es una convocatoria realizada a través de Internet en contra de la corrupción de los políticos".

Asimismo, ha incidido en que se trata de una acción "totalmente pacífica", por lo que ha advertido de que "quien se ponga en plan violento nos encargamos de decirle fuera".

"hasta las narices del sistema político"

"Pretendemos reivindicar que estamos hasta las narices del sistema político y que la gente no pueda opinar, ya que cada cuatro años se va a votar y luego hacen lo que quieren", ha reprobado, al tiempo que ha dicho que los ciudadanos están hartos de que los políticos "estén al servicio del poder financiero y estén pisoteando a los más débiles dedicándose a hacer política para quienes tienen más".

Por su parte, un ingeniero llamado Matías ha considerado que lo que está ocurriendo es "bastante intolerable" y, en este sentido, ha aseverado que lo que más le ha "ofendido" es que los políticos "instaurasen un código ético", algo que, a su juicio, es un "sinsentido, ya que debería haber un código ético de antes, que se supone que es la base legal para todas las actuaciones de un estado de bienestar".

Matías ha desvelado que durante la conversación que mantuvo con agentes de la Policía Nacional le informaron de que las personas que han acudido a la concentración no tienen derecho a realizarla, dado que no se dio aviso a la Delegación del Gobierno, si bien la han tolerado.

No obstante, ha indicado que por un tema de orden público, los agentes les han prohibido pernoctar, bajo la amenaza de sanciones administrativas, en caso de que alguien lo haga. Así, ha desvelado que la Policía Nacional ha tomado datos de algunas personas, con el fin, según ha augurado, de "ejercer represiones administrativas" contra ellas si se lleva a cabo la acampada.