El Consejo de la Juventud y Alega piden compromiso con los derechos de gays y lesbianas ante el Día contra Homofobia

El Consejo de la Juventud de Cantabria y la asociación Alega han pedido compromiso con los derechos de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales y han apostado por la educación como método para acabar contra la discriminación de este colectivo, con motivo de la conmemoración, este martes, del Día Mundial Contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia.

El Consejo de la Juventud de Cantabria y la asociación Alega han pedido compromiso con los derechos de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales y han apostado por la educación como método para acabar contra la discriminación de este colectivo, con motivo de la conmemoración, este martes, del Día Mundial Contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia.

El 17 de mayo de 1990 la Asamblea General la Organización Mundial de la Salud (OMS) suprimió la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales. Por eso se ha elegido esta fecha para fomentar en todo el mundo acciones contra la desigualdad y la discriminación por razón de orientación sexual e identidad de género.

El Consejo de la Juventud de Cantabria denuncia que aún se viven situaciones en algunos países de Europa en los que se pretende aprobar una ley que prohíbe hacer mención a la homosexualidad en los centros educativos y alerta sobre la situación de los adolescentes.

"Necesitamos políticas decididas que apuesten sin complejos por la lucha contra la homofobia, transfobia y bifobia e incluir dentro de la agenda internacional los derechos de las personas LGTB", han aseverado.

Por su parte, desde Alega se hace hincapié este año en la discriminación que sufren en África y Oriente homosexuales, bisexuales y las personas transexuales.

Pero también se alerta de que en España "sigue existiendo desigualdad social y aún pesa sobre ley del matrimonio el recurso de la vergüenza del PP". HOMOFOBIA

En al menos ochenta estados de todo el mundo, mantener relaciones con personas del mismo sexo está perseguida por la ley; en varios países esta condena puede llegar a ser superior a diez años de prisión, contemplando a veces la cadena perpetua, y en ocho países se aplica la pena de muerte.

Algunos países quieren ir más allá castigando la "promoción de la homosexualidad" como es el caso de Uganda, cuyo proyecto de ley anti-gay está actualmente paralizado por la presión internacional.

En Botswana, un diputado declaró libremente su odio a los homosexuales. En Malaui se ha tramitado un endurecimiento del Código Penal para lesbianas y mujeres bisexuales (con penas de hasta 5 años de prisión).

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