Investigadores de Hacienda han asegurado que el presunto cerebro de la trama de corrupción en Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, "en el comienzo necesita ocultar sus actividades directas con el Ayuntamiento" y ha asegurado que es el gabinete jurídico Sánchez Zubizarreta Soriano Pastor de Madrid, formado por varios letrados acusados, el que "se presta a esa ocultación de actividades directas, que él resuelve a su interés".

En este punto, dos funcionarios de la Agencia Tributaria, que participaron en la investigación del caso 'Malaya', han seguido declarando como testigos en la sesión de este lunes del juicio y han explicado al Tribunal algunas de las operaciones en las que, a su entender, "convenia consigo mismo" y en las que aparece oculto tras sociedades.

Han indicado que el gabinete ofrece "un servicio completo de ocultación tanto de actividades como de riquezas", por lo que consideran que prestaba "un servicio integral". En este punto, han añadido que "no sólo se prestan a actos de darle una estructura societaria, constituyendo empresas o facilitándole algunas ya preconstituidas".

Han dicho que observaron "que en ocasiones los propios letrados y socios del gabinete se prestan a llevar a cabo operaciones que creemos realmente trasgresoras, por ejemplo, cuando se efectúa un negocio directo, un contrato de la entidad con el Ayuntamiento". "Eso nos repugna porque contraviene las prohibiciones para contratar de los empleados públicos", ha indicado uno de los testigos.

Han explicado operaciones como la que realiza una sociedad, que prestaba servicios de recogida de residuos y a la que el Ayuntamiento debía dinero, la cual cede esa deuda a otra empresa "con la que el Ayuntamiento hace un convenio de dación en pago de deudas", recibiendo una serie de inmuebles municipales, que posteriormente se transfieren a empresas supuestamente vinculadas a Roca.

Han manifestado que las sociedades del entramado tienen actividades "puntuales" en las que "de manera directa o indirecta se van a relacionar con el Ayuntamiento", apuntando que hay operaciones "muy ventajistas", poniendo como ejemplo la anterior, en la que "un acreedor municipal no cobra, pero cuando le cede parte de su deuda a una sociedad de Juan Antonio Roca inmediatamente el Ayuntamiento le da una finca municipal".

Los funcionarios de Hacienda ha indicado que es "normal" en los grupos empresariales el principio de unidad de caja, aunque han indicado que "la trasgresión se produce en determinadas situaciones", poniendo como ejemplo "cuando no teniendo necesidad de liquidez recibe unos fondos, que los remesa a otra sociedad, que lo remesa, a su vez, a otra".

Así, han indicado que la denominación es de "entramado" y no de grupo de empresas "porque se ha procurado establecer una ocultación de la existencia de esas interrelaciones". A preguntas del fiscal, ambos testigos han detallado los ingresos en efectivo en las cuentas de Roca durante cinco años, que asciende a 12 millones de euros; a lo que hay que añadir unos 13 millones en otro periodo similar.

Han ratificando que esta fórmula forma parte de la fase de "conversión", en la que "el dinero en efectivo lo hemos convertido en un depósito bancario". Luego, el dinero "se hace circular" en el grupo, por vía del préstamo, a través de operaciones inmobiliarias o compras. "Hasta el año 2000, los ingresos en efectivos tienen un correlato en esas simulaciones de préstamos", han dicho.

Han indicado que los préstamos entre sociedades de un grupo son habituales, pero que en este caso, los préstamos ingresando en efectivo no sólo los realizan sociedades, sino también acusados, como, según han dicho, Óscar Benavente, "o su madre, que por lo que sabemos era una pensionista que cobraba la viudedad". "Eso es lo que no es normal y repugna las prácticas ordinarias", ha dicho uno de los testigos. FINANCIACIÓN

También han analizado los archivos intervenidos en la sociedad Maras Asesores y han negado que fueran producto del acusado Salvador Gardoqui, considerado por las acusaciones el contable de Roca, sino que reflejan las formas de financiación, "a través de aportaciones de personas físicas y jurídicas", de las empresas vinculadas al presunto cerebro de la trama.

Así, han ratificado las afirmaciones contenidas en informes sobre las aportaciones de empresarios que son una de las "fuentes de financiación tanto para los gastos particulares de Juan Antonio Roca como para casi todas las empresas del entramado", indicando que, incluso, se intervinieron a Gardoqui anotaciones en las que se distinguen las salidas y entradas por colores.

Asimismo, han insistido en que el "despegue económico" de las sociedades de Roca se vincula al momento en el que éste recala en el Ayuntamiento, en concreto en la sociedad municipal Planeamiento 2000, asegurando que "se puede datar operación por operación desde 1993, para ver cómo se produce ese despegue", hablando de un "salto cualitativo".