El consejero-director general de Naturgas (HC Energía), Fernando Bergasa, ha confirmado que el conjunto de la red de distribución de Lorca "no ha sufrido daños importantes ligados al terremoto, prácticamente no ha sufrido ningún daño digno de mencionar". No obstante, ha precisado que "entre el 15 y el 25 por ciento de las instalaciones necesitarán reparaciones de diversas magnitud, desde las relativamente menos hasta aquellas completamente nuevas".

Pese a ello, ha trasladado el compromiso a la sociedad lorquina de que entre hoy y mañana "seremos capaces de poner en servicio el gas de todas las viviendas que no están dañadas".

Para poder clasificarlas, se ha iniciado una segunda fase del calendario de trabajo, tras garantizar la seguridad y minimizar los riesgos, consistente en "revisar y clasificar todos los edificios a lo largo de hoy y mañana, según la situación en la que se encuentre el acceso al gas".

Bergasa, que ha iniciado su intervención transmitiendo la solidaridad con Murcia "en esta difícil situación", ha afirmado que la primera preocupación de la compañía cuando ocurrió el terremoto fue la seguridad; motivo por el que se procedió a "cortar el suministro a la totalidad de la población de Lorca"; una medida, ha reconocido, que aunque fue "drástica, estuvo impuesta por las circunstancias, ya que se desconocía la magnitud de los daños que en la red de distribución podía haber".

De acuerdo al plan de emergencia, se procedió a sectorizar la población de Lorca en 17 segmentos diferentes, ha explicado el responsable de la compañía, para analizar "uno y por uno y una vez comprobada la red de distribución principal" el capítulo siguiente son las viviendas. Por contra, los polígonos "tienen gas desde el viernes", ha puntualizado el consejero de Universidades, Empresa e Investigación, Salvador Marín.

Si bien no existe riesgo en el conjunto de la red troncal de distribución de Lorca, desde la compañía se ha advertido que se tiene que comprobar vivienda por vivienda para ver si existe riesgo para el ciudadano y, al mismo tiempo, "comprobar la existencia de desperfectos y la necesidad de reparación".

El olor verde:

Gas en las viviendas

Para ello, medio centenar de operarios aproximadamente han comenzado estas tareas de análisis individual de las viviendas al objeto de "verificar la instalación de cada uno de los clientes", teniendo la expectativa de que "la mayoría de las instalaciones estén en buenas condiciones".

Tras ser revisadas las casas, los técnicos dejarán un escrito visible para los vecinos en aquellas casas que estén en condiciones de incorporarse inmediatamente a la red, indicado con un color verde.

Se calcula que sea en cuestión de horas, entre hoy y mañana, que los vecinos con el código verde en sus casas puedan tener gas; mientras que aquellas cuya instalación esté dañada o completamente destruida "llevará más tiempo y dependerá de la magnitud de las instalaciones".

De forma que aquellas casas con código verde indicarán que han sido revisadas y ya se puede hacer uso del gas. Incluso, en dicha cartelería se indicará un número de teléfono para que los vecinos se comuniquen con la empresa instaladora.

Según ha señalado el consejero Marín, "la propia compañía se ha comprometido en este seguimiento de trabajo del gas a llamar uno por uno a todos los clientes para darles información completa de su edificio".

Por todo ello, ha mandado un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía, al tiempo que ha afirmado que "en cuanto al tema eléctrico, de Iberdrola, tampoco ha habido ningún problema y de los 150 transformadores prácticamente todos han funcionado, salvo los problemas típicos", de los que ha comentado que se informará de forma detallada. En cuanto a la energía eléctrica, ha destacado que "no ha sufrido grandes problemas".

Ayudas económicas de la compañía

Por otro lado, la compañía se ha comprometido a contribuir de forma económica. Bergasa ha explicado que habrá dos tipos de ayudas, cuyo valor asciende aproximadamente a 100.000 euros.

Unas ayudas irán destinadas a la "reconstrucción de las instalaciones de gas, de aquellas que son de plena responsabilidad del cliente, y también para los vecinos que se han quedado sin instalación una vez reparada".

Así, para el colectivo de vecinos que hayan sufrido daños por el seísmo en las instalaciones de gas, la compañía "eliminará la cuota fija de la tarifa durante dos meses".

Por su parte, el alcalde de Lorca, Francisco Jódar, ha agradecido a la Consejería las labores de coordinación en estos momentos difíciles; agradecimiento que ha hecho extensivo a la empresa, "por normalizar la situación y dar ayudas económicas".

El objetivo es que "en el menor tiempo posible, la gente pueda volver a sus domicilios y para ello, tienen que estar en condiciones y el gas es importante".