El instituto 8 de Marzo, según confirmó ayer la Conselleria de Educación, se ubicará en el PAU-1 y la obra ya está adjudicada para comenzar a hacerse este año.

Mientras, los trabajos del colegio Benalúa (cuyos alumnos llevan seis años escolarizados en barracones) «podrían empezar a finales de año», según las mismas fuentes, porque que ya se ha redactado el proyecto.

Asimismo, la Generalitat arreglará este año las pistas y asfaltará el patio del colegio Voramar, de infantil y primaria. No obstante, el Ayuntamiento aún no ha trasladado el colegio San Roque, también de infantil y primaria (incluido en los presupuestos municipales), a su nueva ubicación, en la calle Villavieja, según denunció ayer Manolo de Barros, portavoz del PSOE.

Y en la provincia, la Conselleria de Educación no ha ejecutado todavía 450.000 euros previstos en programas de acompañamiento para evitar el fracaso escolar en un total de 19 centros escolares, con 15 profesores en horario extraescolar para clases de repaso. «600 alumnos han sido engañados», comentó ayer Miquel Soler, del PSPV-PSOE.

Otro inconveniente que padecen los escolares alicantinos es la falta de ordenadores. «Hay uno por cada 27 alumnos en la provincia», aseguró ayer Miquel Soler.

Faltan libros de lectura

El 41,6% de los centros de eduación infantil y primaria de la provincia sitúa la falta de libros de lectura en sus bibliotecas como uno de los tres problemas más importantes en lo que a equipamiento escolar se refiere. Los datos proceden de un estudio realizado por el PSOE en 250 colegios de la Comunitat, de los que 91 son de Alicante. Según este informe, el 47% de los centros valoran mal o muy mal las dotaciones que tienen, frente a un 14% que las considera aceptables.